Con la salida de la último asistente a la Nit de Sant Joan de la playa de la Malva-rosa, miles de bañistas empezaron a plantar sus sombrillas en la arena. Y es que la costa valenciana no tuvo ni un respiro desde la noche del 23 hasta bien entrada la tarde del domingo.
Cuatro horas dejaron de margen los operativos de limpieza del Ayuntamiento de València para que las personas que habían esperado a la medianoche para dar los siete saltos reglamentarios a las olas del mar comenzasen a abandonar la arena.
Aún así, a las cuatro de la madrugada, los efectivos policiales tuvieron que desalojar a los rezagados para que el personal de limpieza (formado por 162 operarios, 10 palas, tres máquinas de limpieza de la arena, tres máquinas manuales, siete tractores y tres cisternas de limpieza) pudiese iniciar la recogida de residuos y ceniza que dejó la Nit de Sant Joan, que no fueron pocos.
Más de 19.000 kilos de bolsas, recipientes, vasos, envoltorios y colillas fueron recogidos ayer por los 162 efectivos de limpieza durante las tres horas que duró el operativo. Ingentes cantidades de residuos y desperdicios que el domingo de madrugada aún cubrían la arena de una playa en la que ondea la bandera azul, un color que reconoce el cumplimiento de unas condiciones medioambientales mínimas.
Con el fin del operativo de limpieza, la temperatura comenzó a ascender, llegando hasta casi a los 28 grados a las 14.00 horas, según los datos de la Agencia Española de Meteorología (Aemet).
Al tiempo que los primeros bañistas empezaban a poblar de nuevo la playa, la estampa de la Malva-rosa cambiaba de forma drástica con respecto a la actividad que allí mismo transcurría horas antes. No obstante, la playa seguía al servicio de los miles de bañistas que, a mediodía, no dejaban hueco para una sola sombrilla más.
Para entonces ya no había ni rastro del humo negro que impregnaba el ambiente del sábado. En cambio, fueron muchos los que llevaron su comida a la playa, volviendo a dejar restos de bocadillos y envoltorios durante la mañana.
Refuerzo de limpieza
De hecho, fuentes del Ayuntamiento de València aseguraron que este mismo lunes se reanudará el dispositivo de limpieza para «repasar» las zonas de la playa valenciana donde existan residuos que, en su momento, no se pudieron recoger.
Para ello, han contado con 24 operarios y 6 máquinas limpiadoras que han reforzado el operativo habitual de limpieza que el Ayuntamiento de València lleva a cabo cuando las altas temperaturas de los días de verano provocan que miles de personas acudan a la Malva-rosa a plantar su sombrilla y entrar en el agua, como de hecho ocurrió ayer en todo el litoral.
