El presidente de la Coordinadora d'Entitats Culturals del Regne de València, Juan García Sentandreu, anunció ayer que interpondrá una querella criminal contra Ribó «por un posible delito de apología del terrorismo y otro de odio, con el agravante del uso de las instituciones públicas en la perpetración del mismo».

Se refiere este líder de la ultraderecha valenciana a la autorización del Ayuntamiento de València para que el artista urbano Elías Taño pueda rehacer el mural que pintó en Ciutat Vella criticando la sentencia del caso Alsasua. Tras un error de los servicios de limpieza, que borraron la obra, el consistorio le ofrecerá un nuevo espacio en la ciudad par reproducir su trabajo.

Para Sentandreu, este mural es «de apoyo a los terroristas de Alsasua que han sido condenados entre 8 y 13 años de prisión por las agresiones a dos guardias civiles y sus parejas» y sostienen que la obra «nada tiene que ver con el ejercicio de la libertad de expresión».

Según ha indicado el abogado, Ribó «podría incurrir en un delito de apología del terrorismo, en un delito de odio y otro de prevariación, al ceder un espacio público municipal para que el grafitero Taño vuelva a ensuciar nuestras calles con su mensaje de odio y pro-etarra».

Para Sentandreu, ese mural «supondrá una ofensa gravísima e intolerable a todas las víctimas del terrorismo, tal como ha subrayado la presidenta de Covite, algo que los valencianos no podemos tolerar».

El líder de la ultraderecha ha querido «pedir públicas disculpas a todas las víctimas y sus familiares, puesto que como valenciano, no se siente para nada identificado ni representado por el ultra de Ribó». Sentandreu también manifesta «la desazón que le supone la deriva radical que está teniendo el Ayuntamiento de Valencia, apuntándose demagógicamente a todas las soflamas izquierdistas y trasnochadas».