La presidenta de la Federación de Vecinos de València, María José Broseta, ha denunciado este lunes el auténtico fiasco que supuso el dispositivo de transporte público dispuesto para la noche del pasado sábado 14 de julio, especialmente con motivo del piromusical de Ricardo Caballer, evento al que se sumó el concierto de Luis Miguel, lo que concentró a miles de personas en la Marina de València.

La presidenta de la Federación de Vecinos ha afirmado que han recibido una gran cantidad de quejas por el insuficiente servicio de EMT, FGV y taxis, una situación que se suma las reducciones aplicadas por el horario de verano en julio en agosto tanto en los buses, como en el metro y el taxi.

La dirigente vecinal ha criticado la falta de previsión de los responsables públicos al saber hace tiempo que coincidirían en el recinto portuario, tanto el concierto como los actos de La Gran Fira. Además, "esta misma situación se repitió el pasado sábado 7 de julio en la Marina, cuando se congregaron multitud de personas para presenciar otro castillo y un festival de música, que una vez finalizaron no tenían como volver a sus casas".

Para Broseta, "no se puede estar toda la semana vendiendo el discurso de que se deje el coche en casa para asistir a todos estos eventos cuando la realidad es que una vez finalizan, el transporte público es sencillamente testimonial, lo que obliga a los vecinos y vecinas, muchos de ellos personas mayores o familias con niños y niñas, a recorrer kilómetros andando para volver a sus casas", ha lamentado

La líder vecinal ha recordado que la EMT tan solo tenía en marcha tres líneas de bus (N1, N8 y N9) entre las 23.30 y las 3.30 horas, hora en que finalizaba el servicio, mientras FGV prolongó el horario hasta las 3h en el caso del metro y hasta las 2h en el tranvía, pero a todas luces fue insuficiente. En el caso de los taxis, Broseta ha solicitado que ante este tipo de eventos se emitan órdenes especiales, previa negociación con el sector, tal y como se hace por ejemplo en Fallas, para que puedan salir más taxis a las calles esa noche puntualmente.

Por último, Broseta ha exigido que se negocie en el marco de la Autoridad de Transporte Metropolitano la disposición de un transporte público nocturno de calidad, ya sea mediante buses o metro, los fines de semana durante todo el año, "algo que ya sucede en la mayoría de grandes ciudades españolas, salvo en València".

En cualquier caso, ha solicitado que todos estos problemas se tengan en cuenta en los próximos actos multitudinarios de la Gran Fira y en las futuras ediciones, además de que se de una vez por todas se eliminen los recortes estivales en el transporte público: "hay muchos valencianos y valencianas que dependen del transporte público para trabajar, también en verano, y por supuesto también muchos turistas; si de verdad se quiere fomentar su uso en detrimento del vehículo privado no se pueden repetir estas situaciones".