El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha destacado el apoyo institucional que ha recibido del Gobierno de España a la candidatura de la ciudad de València para acoger el certamen Web Summit. "València merece tener a su alcance todas las posibilidades para celebrar un certamen que apuesta por la cultura del conocimiento, la innovación y la investigación", ha destacado el primer edil.

Así lo ha indicado Ribó en un comunicado, tras mantener este martes una reunión de trabajo con la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Margarida Méndez y el secretario de Estado de Sociedad de la Información y Agenda Digital, Francisco Polo, a los que ha presentado los puntos fuertes de la candidatura de València basados en la calidad de vida de la ciudad, su capacidad organizativa y la coherencia con una visión de ciudad centrada en la sostenibilidad, la innovación y la participación.

En el encuentro, el alcalde ha reclamado la implicación del gobierno central a nivel institucional y económico, con la correspondiente aportación económica. Un compromiso que, según ha indicado el consistorio en un comunicado, ha ofrecido el gobierno central, tal y como harán la Generalitat y el Ayuntamiento.

En el caso de ser finalmente la sede del acontecimiento, se declarará el Web Summit de interés general con las correspondientes desgravaciones fiscales que esto representa para las empresas patrocinadoras.

Ribó ha destacado que València presenta diversos espacios con alto valor patrimonial y cultural, vida cultural y nocturna y el activo de Feria Valencia que será la sede principal en caso de que la ciudad sea elegida.

El alcalde se ha felicitado por el resultado de este reunión y ha remarcado que "València merece tener a su alcance todas las posibilidades para celebrar un certamen que apuesta por la cultura del conocimiento, la innovación y la investigación". "Estamos trabajando para que esa posibilidad se convierta en realidad", ha puntualizado.

En caso de que Valencia sea seleccionada para acoger el Web Summit, el Ayuntamiento ha destacado que ello significará no sólo un importante impacto económico inmediato por la presencia en la ciudad de al menos 60.000 delegados de todo el mundo, sino que también ayudará a la transformación del modelo productivo de la ciudad y de la Comunitat hacia "una economía basada en el conocimiento, la innovación y la inclusión".