El convento de Santo Domingo de València, sede de Capitanía, acogerá próximamente una nueva Unidad del Ejército de Tierra, con veinte personas, que se sumarán a las 238 que, entre civiles y militares, trabajan a diario en esa propiedad del Ministerio de Defensa, donde se ubica el Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad.

Además, está prevista la creación del Mando de Presencia y Vigilancia Terrestre, cuyo Jefe y Estado Mayor se ubicarán en Capitanía, según consta en una respuesta remitida por el Gobierno central al senador de Compromís Carles Mulet, fechada el pasado 24 de julio.

El Gobierno, que reitera que el Convento de Santo Domingo se considera una propiedad fundamental para el Ejército de Tierra, y no está prevista su cesión a la Generalitat, señala que desde hace 176 años el edificio está asignado para fines de Defensa, y por tanto es un edificio "histórico y emblemático del Ejército".

Asimismo, el Gobierno explica que, dado el carácter cultural de este edificio, se está realizando "un gran esfuerzo tanto en la conservación del mismo como en la puesta a disposición del público", organizando jornadas de puertas abiertas y visitas guiadas, que han tenido "una gran acogida" y registrado "un número elevado de visitantes"

Mulet ha manifestado en un comunicado que es la tercera vez que el Gobierno de Pedro Sánchez respalda continuar con el uso militar del convento, aunque esta vez "va más allá y anuncia un incremento de su uso militar, aumentando el despliegue de efectivos instalados en la joya del gótico religioso".

Ha recordado que el pueblo valenciano, por medio de sus representantes en Les Corts, "ha exigido su desmilitarización", pero el Gobierno central "desoye esta petición y ni se plantea analizar esta petición, que debería ser lo mínimo".