El nuevo paso inferior ejecutado por el Ministerio de Fomento en la V-30 a la altura de Xirivella, que permite la conexión directa entre las autovías A-3 y V-30 en sentido puerto de Valencia, entrará en servicio mañana con una torre eléctrica pendiente de retirar, pese a que las obras llevan realizándose desde hace meses.
La torre se encuentra situada justo al final del carril de incorporación del túnel a la V-30 y, aunque por su volumen no es peligrosa, sí que se ha señalizado provisionalmente con balizas verdes y blancas para evitar que los conductores se despisten y puedan chocar con ella.
Desde la Delegación de Gobierno de la Comunitat Valenciana explicaron ayer que el túnel «entra en servicio», lo que no significa que las obras estén terminadas en su totalidad. «Todavía quedan actuaciones pendientes, como la retirada de esta torre de electricidad. Sin embargo, en breve se va a proceder a su traslado», aseguraron fuentes de la Delegación a este periódico, que insistieron en que no representa ningún peligro para la circulación.
Las obras han consistido en la construcción de un vial de aproximadamente 1,25 km de longitud que permitirá la conexión directa desde la A-3 sentido València hacia la V-30 sentido puerto, evitando el paso por la glorieta de la CV-403 de Xirivella. Para ello se ha construido un paso inferior con una longitud de aproximadamente 540 m ejecutado mediante muros-pantalla. El nuevo paso inferior facilitará el tránsito por la zona, evitando el recorrido por 2.400 metros de viales situados en Xirivella.