La puesta en marcha cuanto antes de la peatonalización de plaza donde se ubica la iglesia del barrio. Esa es la demanda que vecinos de Sant Marcel·lí han realizado al Ayuntamiento de València como forma de recuperar el casco antiguo de una zona cuya creación data de mitad del pasado siglo.
Como destaca el portavoz de la Asociación de Vecinos, Vicent Soler, «sabemos que desde la administración ya hay interés en acabar la faena» tras realizarse el pasado año un primer paso con la puesta de maceteros para controlar el tráfico, una iniciativa valorada, pero que no cumple las peticiones vecinales. Por ello, para el responsable de Sant Marcel·lí esta «no es una solución» y queremos «un plan bien diseñado» en el cual desaparezcan «algunos elementos que no queremos en el barrio».
Esta reclamación de la asociación del barrio sureño de la capital del Turia tiene como principal foco de preocupación «la fuente que está en el medio de la plaza» -situada en medio de la calle del Arzobispo Olaechea- que para los vecinos resulta «un gasto muy importante económicamente». Por otro lado, el líder vecinal también recalca que este elemento «no nos gusta, ya que esa zona podría servir para otras cosas más útiles».
Asimismo, en este proyecto que los vecinos esperan tener a corto plazo en relación a su principal plaza tiene un papel fundamental, además de la peatonalización, que se establezca en la zona «un mobiliario decente y que sea asumible económicamente, como podrían ser unos banquitos, por ejemplo», destaca Soler.
Un obra en ciernes
En el proyecto que dotará de peatonalización uno de los principales puntos del barrio de San Marcelino está a cargo de la Concejalía de Urbanismo, en colaboración con la de Movilidad. Es por ello, que Vicent Soler quiere que se aceleren los trámites «porque están avanzados y sabemos que hay presupuesto» con el que se podría realizar.
Antes de ello, el líder vecinal explica que quedan por cerrar «algunos flecos» en algunos puntos como la posible influencia de la peatonalización en la falla cercana o la dificultad de acceso de los bomberos en caso de incendio, pasos que cuando se solucionen permitirán «que se pueda sacar pronto ya a licitación el proyecto».
