El Ayuntamiento de València prevé trasladar al jardín de Blasco Ibáñez el área de socialización canina que, inicialmente, se iba a construir en la calle Músico Ginés. Si bien este proyecto salió elegido en las votaciones de los presupuestos participativos, los vecinos de esta calle mostraron su rechazo a la iniciativa porque la propuesta la realizaron personas de otro distrito, por lo que no cumplía la normativa de la consulta ciudadana.

Sin embargo, del error nadie se dio cuenta hasta que la concejalía de Parques y Jardines inició las obras para convertir un pequeño trozo de jardín de la mediana de la calle Músico Ginés en área de socialización de perros. El rechazo de los vecinos ha propiciado que, finalmente, no se autorice este espacio canino, e incluso seprohíbe la entrada de canes a la zona perimetrada.

En la mediana de la calle Músico Ginés se iba a invertir un total de 90.500 euros, aunque los trabajos se detuvieron tras las quejas vecinales. Sin embargo, se llegó a instalar el típico vallado de las zonas de socialización canina, con puertas incluidas. Desde la concejalía de Parques y Jardines explican que una de las propuestas vecinales es la de instalar una zona infantil, por lo que es posible que la valla sea compatible con el nuevo uso, ya que se encuentra en la mediana de una calle y así se protegería mejor a los pequeños. En todo caso, indican, cuando pase el periodo de garantía de la obra, se estudiará qué hacer con el vallado instalado.