El grupo municipal de Compromís quiso rebajar ayer sus críticas al PAI del Grao pasando del «no» rotundo de Ribó a una simple solicitud de documentación para conocer los «detalles» del proyecto e introducir «correcciones que respondan al interés general». Este cambio de talante se produce después de que sus socios de Gobierno e impulsores del PAI, el Grupo Socialista, admitiera correcciones pero no una paralización del proyecto encargado hace ya año y medio, proyecto que, además, había sido consultado con el alcalde, según dijeron.

El encargado de acomodar la posición de Compromís sobre el PAI del Grao, proyecto que debe servir para urbanizar el tramo final del viejo cauce y conectar la ciudad con el mar, fue el concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi. Frente al «no» rotundo del alcalde, que rechazaba el paseo elevado sobre las vías, el escaso ancho del cauce o el derribo de edificios protegidos, Grezzi, en su condición también de vicepresidente del Consejo de Administración de la empresa pública Aumsa, dijo ayer simplemente que ha solicitado el acceso al expediente del PAI del Grao para conocerlo de primera mano antes de hacer modificaciones.

«Cuando se encarga un proyecto como éste, el resultado final puede estar sujeto a correcciones que responden al interés general de nuestra ciudad», dijo Grezzi, que prefiere confirmar «todos los detalles necesarios sobre este proyecto» antes de tomar una decisión final.

Falta de comunicación

El concejal justifica ese cambio de postura aludiendo «al mecanismo utilizado para hacerlo público, en referencia a la publicación del proyecto en este periódico. Y dice: «Puesto que no se ha informado en ningún Consejo de Administración de Aumsa, el paso inicial preceptivo es comprobar, accediendo al expediente, si la filtración se corresponde con la realidad y, a partir de ahí, garantizar que el proyecto satisfaga el interés general de la ciudad , que ha de ser el objetivo de todos los representantes públicos».

Y mientras de ponen de acuerdo los socios de Gobierno, sus discrepancias siguen dando argumentos a la oposición. El portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, Eusebio Monzó, calificó de «inaceptable» el ninguneo del PSPV y València en Comú al alcalde, Joan Ribó. «La figura institucional del alcalde no merece el desprecio al que le someten sus socios del tripartito» en asuntos como el PAI del Grao, la Marina o el Parque Central, destacó Monzó. Ribó, añadió, « lleva un mes de agosto horribilis, para olvidar, en el que los socialistas y los podemitas le han desautorizado o dejado fuera de la toma de decisiones estratégicas como es el diseño del Grao, la deuda de la Marina, la ampliación del acceso a Valencia desde el Norte por la V-21, el bloqueo del Cabanyal, la ampliación del jardín Botánico o el retraso en las obras del Parque Central».

Monzó calificó de nefasta la gestión de Ribó, con retrasos y bloqueos constantes en los grandes proyectos para València y el desperdicio de tres años de crecimiento económico en toda España para haber impulsado nuevas infraestructuras y dotaciones pública.

Junta de portavoces

Ciudadanos, por su parte, solicitó ayer al alcalde que convoque una Junta de Portavoces extraordinaria con el objetivo de que los miembros del tripartito expliquen sus posturas. Su líder en el Ayuntamiento de València, Fernando Giner, ha recordado que «el PAI del Grao es un proyecto de gran importancia para la ciudad» y en esta línea ha exigido que Compromís, PSPV y Podemos expliquen a la oposición «sus diferencias al respecto y establezcan plazos concretos para el proyecto». «Queremos que el tripartito nos explique qué lío han montado con el PAI del Grao», añadió. «Es inadmisible que después de tres años la ciudad de València siga sin mirar al mar y que todo sea por desencuentros internos del tripartito», lamentó el portavoz de Ciudadanos.