El director General de Obras Públicas, Transportes y Movilidad, Carlos Domingo, anunció en su reciente reunión con tres concejales del Ayuntamiento de València que cuenta ya con un proyecto para la pacificación del embarcadero de Pujol, posiblemente el lugar más visitado de València después del balcón del consistorio por sus privilegiadas vistas sobre el lago de la Albufera.

Como ha denunciado en diversas ocasiones Levante-EMV, este punto es uno de los puntos más peligrosos de la carretera CV-500, ya que cientos de personas se detienen con sus vehículos cada día para hacer fotos de l'Albufera en el mirador.

Ninguna seguridad

La ausencia de un paso de peatones o el pequeño aparcamiento obliga a los visitantes a cruzar la carretera sin ninguna seguridad o a estacionar sus vehículos en zonas prohibidas, como el mismo arcén de la CV-500.

El director General de Obras Públicas, Transportes y Movilidad, Carlos Domingo, se comprometió con los concejales Giuseppe Grezzi (Movilidad), Sergi Campillo (Devesa-Albufera) y Consol Castillo (Pobles de València) a adecuar toda la zona del embarcadero de Pujol.

La idea es crear un paso de peatones con una isleta en medio de la calzada, realizar una operación de calmado de tráfico mediante señalización y habilitar una nueva zona para el estacionamiento con el objetivo de que la actual, muy pequeña, se reserve para personas con movilidad reducida y paradas de dos minutos para que desciendan pasajeros, pero no estacionen permanentemente.

Actuación en El Palmar

Para cuando se inicien estas obras, Consellería ya habrá ejecutado antes la rotonda de acceso del Palmar, a un kilómetro al norte, la actuación más inmediata prevista por la Consellería. Como dijo Carlos Domingo «la rotonda de acceso al Palmar permitirá en el tramo del embarcadero de Pujol ordenar adecuadamente los movimientos y evitar los giros indebidos en la propia calzada como ocurre actualmente».

A la nueva rotonda del Palmar y las mejoras en el mirador de Pujol, se suma también la creación de una paso de peatones regulado por semáforo con pulsador a la altura del Port del Saler, en la CV-500, una de las medidas históricamente demandas por los vecinos.