La Agencia Valenciana Antifraude ha dado traslado a la Fiscalía Provincial para que investigue cuatro posibles delitos que cometió la dirección de EMT València durante la última etapa del Partido Popular al frente, con el concejal Alberto Mendoza como máximo responsable.

Se trata de una denuncia que trasladó el actual concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, a Antifraude a cuenta de las jubilaciones parciales realizadas desde el año 2013. Según explicó ayer el edil de Compromís, la Agencia Valenciana Antifraude comunicó ayer que observa hasta cuatro posibles delitos: malversación de caudales públicos, prevaricación, fraude en subvenciones y falsedad documental.

La Agencia Antifraude se ha dirigido por escrito a la actual dirección de EMT València para anunciarles el traslado del expediente a la Fiscalía Provincial «ante la gravedad de los hechos apreciados de los que pueden derivarse responsabilidades penales».

El concejal Grezzi explicó que la Agencia Antifraude mostró su agradecimiento a la actual dirección de la EMT por su iniciativa de denunciar los hechos hace unos meses, y entiende que tanto los trabajadores como los sindicatos están exonerados de cualquier responsabilidad sobre lo sucedido. Se trata de la firma en el año 2013 tiene acuerdo para pre jubilaciones parciales, que el actual gobierno consideró que eran ilegales.

Grezzi pidió al actual portavoz del PP en el Ayuntamiento Valencia, Eusebio Monzó, y a la máxima responsable del PP en la Comunitat Valenciana, Isabel Bonig, que estudien la responsabilidad política que debe asumir Alberto Mendoza si se confirman las sospechas de la agencia antifraude.

La dirección de la EMT detectó una posible ilegalidad en las jubilaciones parciales de los empleados de esta empresa pública, a quienes se les permitió durante 17 años trabajar menos horas de las permitidas por ley. Así, a partir de los 61 años, podían acogerse a una jubilación parcial, con una reducción de jornada del 85 %, lo que en el caso de esta empresa se traducía en 131 días de trabajo.

Desde 2001 existía un acuerdo entre la gerencia y los representantes de los sindicatos, alcanzado en el marco de la negociación colectiva, según el cual los empleados en esta situación trabajaban 65 días, aunque oficialmente se comunicaban y abonaban las 131. Grezzi, como presidente de la EMT, decidió llevar estas irregularidades a la Agencia Antifraude.

Alberto Mendoza, al respecto de las acusaciones sobre irregularidades en las prejubilaciones de la EMT, afirmaba que Grezzi «ha conseguido colar un gol por la ventanilla de su Agencia Antifraude». Para Mendoza, está claro que el edil de Compromís «tiene que sentarse en breve a negociar un nuevo convenio laboral, y lo que quiere con esta sobreactuación es debilitar a los sindicatos». Mendoza remitió al último comunicado del Comité de Empresa de la EMT calificando de «una vendetta del Sr. Grezzi que quiere poner de rodillas a los sindicatos de la EMT, y de paso, perjudicar al PP».