El vídeo en que se ve a un camarero de un restaurante del Paseo Marítimo de València que, mientras le cambia monedas a un gorrilla, hace comentarios como que están «libres de impuestos» y que el inmigrante se lo lleva «limpito» mientras que él, que es español, está pagando impuestos para ese hombre, despertó ayer una gran indignación y llevó a SOS Racismo a instar a la Fiscalía a «tomar cartas en el asunto para despejar la duda de si la difusión del vídeo se produce ante un supuesto delito de iniciación al odio o si es justo por lo contrario».

El abogado de SOS Racismo, Paco Solans, asegura que si el vídeo se ha tornado viral es porque «se ha compartido desde las dos perspectivas, desde la que ve el vídeo con indignación y desde el que apoya lo que dice el camarero».

Tanto el Ayuntamiento de València, cuyo alcalde recalcó que la ciudad es «abierta y rechaza las actitudes racistas», como la Fiscalía, han anunciado que estudiarán el incidente por si procede emprender algún tipo de medida legal.«Los restaurantes valencianos no son de esta manera, tienen un comportamiento mucho más normalizado», resaltaba el alcalde.