La música tradicional africana a todo volumen procedente de la megafonía instalada desde primera hora de la mañana de ayer en la plaza de la Virgen con motivo de la celebración de un encuentro impulsado por el centro cultural islámico de València obligó a cerrar durante varias horas tres de los cuatro accesos a la popular Basílica de la Virgen.

Para que la música no interfiriera en las celebraciones religiosas los responsables del templo mariano optaron por cerrar tres puertas, entre ellas la que recae a la plaza de la Virgen, dejando abierta únicamente la de atrás, que da a la playa de la Almoina, lo que generó quejas y desorientación de los feligreses, sorprendidos de ver la puerta principal de la Basílica (abierta todos los días) cerrada a cal y canto. «No estamos en contra de nada, pero hemos cerrado las puertas porque parecía que teníamos los altavoces dentro y no podíamos celebrar las misas con normalidad», explicó a este diario el rector de la Basílica, Jaime Sancho.

El encuentro, al que asistieron unas 50 personas de nacionalidad senegalesa, veneraba al teólogo y profeta senegalés Cheikh Ahmadou Bamba, y tenía permiso de la Delegación de Gobierno y debía llevarse a cabo entre las 11 y las 16 horas. Sin embargo, la música empezó a sonar a las 9 de la mañana, a pesar de que los asistentes no había llegado y las sillas estaban vacías, lo que impidió que la primera misa de la Basílica, a las 10 de la mañana, se pudiera celebrar con normalidad. El rector de la Basílica solicitó a los agentes del dispositivo de la Policía Nacional que vigilaba el acto que instará a los organizadores a bajar la música, al menos hasta que comenzase el acto en sí, previsto para el mediodía. «La bajaron un rato y al poco la han vuelto a subir», ante lo cual, el rector dio orden de cerrar todas las puertas menos la trasera.

En la Basílica se llevan a cabo por las mañanas cinco misas, la primera a las 10 y la última a las 13 horas. La de las 10.30 se retransmite por televisión. «No podíamos hacer la misa con esta música de fondo retransmitiéndose en directo», apuntó el rector . Al finalizar la misa de las 13, que amenizan los niños cantores de la Escolanía de la Virgen y es una de las más concurridas, la Basílica volvió a abrir sus puertas.

El encuentro cultural al que asistieron senegaleses llegados de Gandia, Cullera y otras poblaciones, empezó en el polideportivo de Benimaclet, desde donde los asistentes se desplazaron a pie hasta la plaza de la Virgen. Los organizadores de este encuentro, que repartieron pegatinas con el lema «no por la violencia, sí a la paz», leyeron un comunicado en la plaza agradeciendo a las autoridades el permiso para ocupar una plaza tan emblemática para los valencianos , especialmente, para los católicos. Los promotores valoraron asimismo el diálogo interreligioso. Un diálogo que para los responsables del Arzobispado no se ha dado puesto que «nadie nos ha consultado».