El solar ubicado entre las calles Nino Bravo y Alcalde Gisbert Rico, y que sigue utilizándose como parking ilegal, a pesar de las múltiples denuncias que acumula por parte de los vecinos, se ha convertido en un nuevo punto de discordia o falta de entendimiento entre los socios del Govern de la Nau. De este modo, la Concejalía de Policía Local, dirigida por Anaïs Menguzzato (PSPV), explica que los agentes ya han formulado denuncias a los vehículos allí estacionados, en múltiples ocasiones, y alega que «no puede haber presencia policial de manera permanente». A lo que añade que «sería oportuno estudiar la adopción de alguna medida de colocación de alguna barrera física que impidiera el acceso al solar». Una medida, por cierto, que también ha sido solicitada por los propios vecinos, así como la instalación de señalización que especifique que allí está prohibido estacionar, sin obtener respuesta.

A este requerimiento, que fue realizado tras una petición del Síndic de Greuges, el Servicio de Movilidad Sostenible, adscrito a la Delegación de Giuseppe Grezzi (Compromís) alega que «dadas las características del solar donde se produce el estacionamiento, la colocación de bolardos se considera una medida poco eficaz para evitar el acceso al mismo». Añaden que estos son «fácilmente susceptibles de vandalismo, se arrancarían con el fin de poder seguir realizando el estacionamiento, como demuestra la experiencia en lugares similares». Por otra parte, indican que el acceso, dado el extenso perímetro del solar, podría hacerse por otros puntos. Ante esta situación, sugieren la posibilidad de proceder a un vallado, pero matizan que el informe del Servicio de Residuos Sólidos «no lo considera conveniente porque conllevaría otros efectos no deseados desde el punto de vista de la limpieza y utilización del espacio para actividades que pudieran afectar a la convivencia vecinal». Por tanto, vuelven a pasar la pelota a la Policía indicando que «lo más conveniente sería la vigilancia policial para sancionar la infracción de circular por las aceras, pues es el único modo de acceder al solar».

Finalmente, el Síndic de Greuges solicitó informe a Patrimonio, adscrito a la Delegación de María Oliver (València en Comú), la cual eleva la problemática hasta la Generalitat Valenciana. Ellos indican que el solar se cedió gratuitamente a la Generalitat Valenciana para la construcción del Conservatorio Profesional de Danza». Y aseguran que «la parcela continúa siendo municipal, pero la disponibilidad de la misma ya no corresponde al ayuntamiento».

No obstante, dicha conselleria todavía no ha aceptado esta cesión. Aunque los vecinos informan que el servicio de infraestructuras de la Conselleria de Educación les indicó en abril que habían iniciado el expediente de aceptación del solar, aunque no podían precisar plazos.

Ante esta respuesta, el Síndic de Greuges dictamina que, según el artículo 44de la Ley 14/2001, de 10 de abril, «en tanto la citada cesión no sea aceptada, el solar sigue siendo de propiedad municipal». Por lo tanto puede adoptar acuerdos en relación al uso del mismo, en tanto no sean contrarios al ordenamiento urbanístico, y al uso posterior que se pretende hacer con la cesión a la Generalitat.

El síndic indica que existen «criterios dispares sobre la forma de prohibir el uso como parking de vehículos». Y recomienda al consistorio que analice las soluciones «para evitar la ocupación irregular como aparcamiento».