La Reial Senyera, la enseña más emblemática y venerada por los valencianos y que acaba de cumplir 90 años, podría lucir con todo su esplendor una vez restaurada en los actos de celebración del 9 d'Octubre, Día de la Comunitat Valenciana, del próximo año.

Al menos esa es la intención del Ayuntamiento de València, que trabaja para "cuadrar" las fechas y aprovechar que tiene que vaciar todas las piezas del Museo Histórico Municipal durante su remodelación, entre ellas la Senyera, para acometer la restauración de la bandera, con el tiempo necesario para que esté lista en esa fecha.

Así lo ha manifestado la concejala de Cultura, Glòria Tello, quien ha reconocido que "necesita" esa restauración, especialmente en la tela y la empuñadura, además de asegurar que se podría rebajar algo el peso del mástil, sin que se pierda el equilibrio al llevarla.

Tras la última procesión cívica del 9 d'Octubre en 2017, Tello ya anunció la intención del Consistorio de remodelar la Senyera, la única bandera del mundo con estatus como el de un rey, concedido por Pere II, que hace que reciba tratamiento con honores y siempre vaya en vertical sin inclinarse nunca.

La enseña valenciana no ha escapado al deterioro de nueve décadas de vida. Fue restaurada por última vez hace ya más de una década, por parte de Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales (Ivacor), actualmente Instituto Valenciano de Conservación (IVC+R), y antes ya había sido rehabilitada en 1962 y 1994.

Según Tello, el Museo Histórico de València "necesitaba ser repensado" porque, a su juicio, la gente que lo visita "no entiende nada", a no ser que conozca mucho la historia y la cultura valencianas.

"El proyecto de reforma ya está aprobado y ahora mismo se están haciendo unas obras paralelas", concretamente un ascensor para permitir el acceso trasero a personas con movilidad reducida.

Para 2019 "estará ya todo aprobado y se iniciará la obra del museo", según la edil. Entonces habrá que "vaciar las instalaciones" y dejar los fondos en custodio en un almacén y será el "momento oportuno" para llevar la Senyera a restaurar.

En el Museo Histórico Municipal, la antigua Casa de Enseñanza fundada por el arzobispo Mayoral en el siglo XVIII y ubicada en la parte baja de la Casa Consistorial de la plaza del Ayuntamiento, se pueden ver planos de la evolución de la ciudad, entre ellos los de Mancelli de 1608, así como 46 grabados de la colección municipal, pinturas murales de Ramón Stolz o el primer incunable del Llibre dels Furs.

También alberga algunos de los símbolos y reliquias que son un referente de la historia de València, casi todos ellos provenientes de la Antigua Casa de la Ciudad: el Pendón de la Conquista, el Trofeo de la Conquista, la Espada del Rey Don Jaime, el cuadro de La Inmaculada y los Jurados de Espinosa, el relicario de Sant Jordi, el Arcángel San Miguel o Las Llaves de la Ciudad, además de la Reial Senyera.

"Hay que cuadrar las fechas porque si las obras empiezan en un momento en el que al poco tiempo es el 9 d'Octubre, evidentemente no vamos a llevarla a restaurar arriesgándonos a que la Senyera no esté lista -para la procesión cívica-. Si eso sucediera, lo que haríamos es iniciar la restauración después de la celebración", explica Tello.

Y asevera que si da tiempo cuando se vacíe el museo, "se hará", aunque remarca que también dependen del equipo que vaya a hacer la restauración.

"A mí me gustaría que fuera el Instituto Valenciano de Conservación pero tendremos que valorar más opciones", añade para detallar que la parte que requiere una mayor restauración es "la tela, sobre todo en su parte de la empuñadura, que está muy desgastada".

Recuerda que se estudió la opción de "vaciar un poco el peso del mástil, pero hay que tener en cuenta que si lo bajas mucho, como la tela pesa tanto, podemos acabar teniendo un desequilibrio en peso" y hay que encontrar el punto que hay que rebajar y que no impide que sea trasladada.

La actual Reial Senyera ya es una réplica, encargada el 11 de mayo de 1927 y que fue acabada para su salida por primera vez en la procesión cívica del 9 d'Octubre del año siguiente.