Los sindicatos policiales han demandado a la Generalitat Valenciana y al Ayuntamiento de València previsión y celeridad para cubrir las decenas de plazas de policía local que podrían quedar vacías cuando a primeros de año se apruebe la nueva normativa nacional sobre jubilaciones anticipadas en el cuerpo. De los 247 policías que tienen más de 59 años y podrían acogerse a esta norma, no se esperan muchas jubilaciones entre los mandos, ya que perderían dinero, pero sí entre los 1.307 agentes, de los que podrían salir unos 150, calculan. Todo un «agujero» en la plantilla que podría notarse en la semana de Fallas y muy especialmente en verano.

Tal como reveló UGT, la nueva Ley de Jubilación Anticipada de la Policía Local, que podría estar vigente a primeros de año, permitirá jubilarse a todos los agentes mayores de 59 años, es decir, 247 en València, un 16 % de la plantilla, que suma unos 5.500. Y no se ha previsto por parte de la Generalitat Valenciana ningún «procedimiento exprés» para solucionarlo. Ayer, otros sindicatos se sumaron a esta reflexión y pidieron unánimemente celeridad y previsión por parte de las administraciones implicadas. Ana Odena, responsable de Comisiones Obreras (CC OO), recordó que la nueva Ley de Coordinación de Policías Locales de la Generalitat Valenciana, vigente desde enero de este mismo año, prevé un proceso exprés para estas situaciones, lo que significa que la administración autonómica ya debería tener en marcha un decreto que regule esos procesos en todos los municipios.

Desde Comisiones Obreras ya lo han pedido oficialmente a la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias y en vistas de que no hay solución volverán a solicitarlo, dijo Odena, que considera urgente redactar un borrador, convocar a los sindicatos y darle a los ayuntamientos «el trabajo ya hecho», con las bases, las pruebas, los plazos, etc.

Si esto no se hace, «la Policía Local tendrá problemas», porque los hechos demuestran que los procedimientos en València son muy lentos. De hecho, en estos momentos se están haciendo las oposiciones de las 30 plazas de Policía Local convocadas en 2016, agentes que no se incorporarán hasta mediados del año que viene, tres años más tarde. Y así ocurrirá con las 40 plazas de 2017 y con las 50 que se han convocado en 2018.

«Esto no se puede tolerar, hay procedimientos más rápidos», dijo Ana odena, que asegura que los plazos se han alargado en València «primero porque habría otras prioridades y luego por los plazos mismos de la oposición».

Policías de calle

Por su parte, Jesús Santos, secretario del Sindicado Profesional de Policía Local y Bomberos (Spplb), explicó que de los 247 agentes con opciones de jubilarse anticipadamente no habrá muchos altos cargos por cuestiones económicas (perderían dinero), pero sí un 80 % de los agentes rasos, es decir entre 140 y 150. Y eso, a su juicio, puede complicar mucho el funcionamiento normal, más aún en Fallas y sobre todo en verano.

Por eso, Santos cree que el ayuntamiento debe acogerse a la Ley de Presupuestos Generales del Estado, que ya incluye una partida en 2019 y 2020 para hacer procesos extraordinarios. «Hoy hemos recibido información de que la nueva normativa ha sido remitida ya al Consejo de Estado, lo que significa que a primeros de año será una realidad», dijo el secretario del Spplb. «Si preguntamos cuánta gente se va a jubilar podemos iniciar ya el proceso y cubrir las plazas cuando se produzcan las bajas», precisó.

Jesús Santos también valora el procedimiento exprés de la Generalitat Valenciana, aunque según dice, fueron expulsados de la mesa de trabajo. Cree posible hacer el decreto y reducir de 8 a 4 el número de pruebas, por ejemplo sustituyendo la de valenciano por una titulación.

En cualquier caso, el problema de todo ello es que si se hacen muchos concursos-oposición a la vez, cosa bastante probable, el Instituto Valenciano de Seguridad Pública y Emergencias (Ivaspe), podría «saturarse», con lo que el colapso está casi asegurado. Respecto a otras opciones como las comisiones de servicio, el sindicato es pesimista, pues en la actualidad solo hay 11 agentes en esta situación teniendo una bolsa de 260. Al parecer, trabajar en València es atractivo para los agentes de otros pueblos, pues ganan más, pero los municipios están también muy cortos de plantilla y no los dejan salir.

De todas formas, Santos cree que es una opción posible y propone, incluso, que no se reduzca a Fallas, sino que esté abierta para todo el año.