La comisión de Transición Ecológica del Congreso de los Diputados aprobó ayer por unanimidad la propuesta de Compromís que reclama el cierre y el desmantelamiento de la subestación eléctrica del barrio de Patraix. Una reivindicación vecinal que lleva once años pendiente, desde la explosión registrada en mayo de 2007. La proposición no de ley en la que se recogía la solicitud de esta coalición ha sido defendido por el diputado Enric Bataller y ha contado con el voto a favor de todos los grupos parlamentarios de la Cámara Baja.

Compromís recordaba que el pleno del Ayuntamiento de València aprobó una declaración institucional instando al cierre de esta subestación. Bataller señalaba que el traslado «es una cuestión de tranquilidad y salud pública». La iniciativa aprobada incluye también la necesidad de contar con una partida suficiente en los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para poder acometer la construcción de una nueva subestación eléctrica que sustituya a la de Patraix en Nuevo Cauce, en los terrenos reservados para tal fin junto al cementerio general de València.

Compromís apuntaba que la planta eléctrica de Patraix, en pleno casco urbano de València, «aglutina numerosas irregularidades» y exponía que a la explosión e incendio de 2007 «se suma la falta de licencia». El Tribunal Superior de Justicia ratificó la nulidad declarada por un juzgado en 2008 al calificar la actividad de peligrosa.

Bataller valoraba la decisión del nuevo Gobierno central de modificar la planificación energética 2015-2020 para incluir el traslado de la subestación eléctrica, pero reclamaba «fijar una fecha para, a la mayor brevedad», poder llevar a cabo el desmantelamiento y cierre de las instalaciones de Patraix. Joan Ribó, por su parte, incidía ayer en la necesidad de contar con recursos económicos para hacer efectivo el traslado, mostrando su confianza en que las partidas necesarias se contemplen en los Presupuestos Generales del Estado 2019. El alcalde de València considera que este debe ser uno de los asuntos que se tengan en cuenta al negociar los PGE y ha resaltado, en este sentido, que los votos de Compromís «no están decididos». Así, insta a que en las cuentas del Gobierno para el próximo año se pueda contemplar dicho traslado y otras actuaciones necesarias para València y el resto de la Comunitat Valenciana.