El Bloc de València, partido integrante de Compromís, organizó ayer un debate abierto con el título «València-Palma, coordenadas del cambio», en el que se pudo se manifiesto que las políticas de las dos ciudades «van de la mano en cuestiones como la movilidad sostenible, con la construcción de nuevos carriles bici o la apuesta para renovar las flotas de autobús, la creación de nuevos espacios verdes en las dos capitales y en avanzar hacia un modelo de ciudad europea y moderna que genere oportunidades de trabajo para la población».
Estuvieron presentes el alcalde de Palma, Toni Noguera (Més per Mallorca), el portavoz de Compromís en el Ayuntamiento, Pere Fuset, y la concejala de Igualdad y Políticas Inclusivas, Isabel Lozano; quienes abordaron como reto principal «cómo afrontar el problema de la vivienda turística que está incrementando los precios de los alquileres en València y que ya supuso un problema para Palma».
Fuset explicó que «Palma es para nosotros una ciudad referente en el combate contra la masificación turística. Han sabido poner orden a la problemática de los apartamentos turísticos, introduciendo una regulación que garantiza que en las viviendas plurifamiliares de la ciudad no puede instalarse ningún apartamento de estas características. Así se evitan las molestias y acota legalmente su implantación, lo que hace que los alquileres no se descontrolen»..
Isabel Lozano ha reivindicado que «desde el Bloc seguimos apostando por la implantación de la tasa turística de cara a la siguiente legislatura, Apostamos firmemente por su implantación en València, para paliar los efectos negativos que se derivan del turismo. Su cuantía simbólica, pero revertiría en vivienda social y limpieza».
