El Govern de la Nau presentó ayer los presupuestos de 2019, los últimos de este mandato, que ascienden a 848 millones de euros y que centran esfuerzo en mejorar la limpieza, con 70,4 millones de euros (un 6% más) y el personal, cuyo gasto sube en 15 millones, al tiempo que elevan las inversiones reales en un 10% hasta los 76,6 millones de euros.

Inversiones que incluyen 8 millones para dar impulso, tras años de atasco, al plan europeo (Edusi) del Cabanyal, cuyas obras han merecido duras críticas de los vecinos a Joan Ribó, y proyectos urbanos estrella como la remodelación de la plaza de la Reina, que recibirá 7,7 millones. La de Brujas, en cambio, solo podrá empezar a urbanizarse.

El Govern de la Nau difiere a 2020 la inversión fuerte en esta plaza (3,7 millones), a cuya urbanización este año solo se destinarán 750.000 euros y donde el ayuntamiento ya trabaja en las obras del aparcamiento subterráneo, por cuya compra a la Generalitat deberá desembolsar el año próximo 1,2 millones de euros. En el apartado de limpieza se incluyen inversiones para seguir desatascando el colector norte, que recibirá 3,5 millones de euros para acabar con la acumulación de toallitas.

Entre las inversiones se incluyen 3,2 millones para la modernización del sistema de compra del ayuntamiento y 1,4 para mejorar la calidad del aire. La construcción de nuevos centros de animales tendrá el año próximo una partida de 860.000 euros.

Para comedores escolares se destinarán 1,66 millones (sin contar las becas de comedor), para mantenimiento de edificios municipales, se destinarán 47 millones (aumentando otro 6,31% respecto al año anterior). A cooperación al desarrollo el Govern de la Nau dedicará 2,8 millones, alcanzando así el objetivo del 0,7%.

En lo que se refiere a patrimonio histórico en las inversiones figuran 2,3 millones para la Aceitera de Marxalenes y futuro centro de mayores, 860.000 euros para el centro cultural de Torrefiel, 550.000 euros para las excavaciones y urbanización del monasterio de San Vicente de la Roqueta, 620.000 euros para la alquería de Albors, 121.000 euros para el Centro Cultural Reina, una de las dotaciones comprometidas con el barrio del Cabanyal, y 737.000 para iniciar el eterno plan de la muralla islámica.

En materia de patrimonio también se destinan 3,4 millones de euros para la rehabilitación de los tinglados 2, 4 y 5 de la Marina.

Otra inversión destacada y esperada es la del Museo Histórico, donde se custodia la Senyera y otros símbolos identitarios, que carece de climatización e iluminación adecuada y que el año próximo contará con una partida de 983.000 euros.

Mejoras de mercados (en concreto el del Grao y el de Rojas Clemente), que recibirán casi dos millones de euros, nuevas peatonalizaciones (como la de la calle Ibiza), 1,2 millones de euros para ampliar la red del carril-bici en Primado Reig, Fernando el Católico, General Avilés, la calle Uruguay y Tres Forques; y 1,6 para el nuevo rastro de Tarongers son otras de las inversiones significadas del año próximo.

Las cuentas también incluyen 560.000 euros para el soterramiento de contenedores en zonas que el alcalde no pudo determinar en la rueda de presentación de los presupuestos.