La dirección de la Ciutat de les Arts i les Ciències SA (Cacsa) niega rotundamente la existencia de acoso laboral y el supuesto trato de favor en un contrato de mantenimiento ante la demanda contra los directores de la Ciutat de las Arts i les Ciències presentada por un técnico de la empresa, publicada el pasado martes por Levante-EMV.

En un comunicado remitido a este periódico, fuentes de Cacsa señalan respecto al contrato de mantenimiento, que la adjudicación del mismo fue realizada por resolución firme del Tribunal Central de Recursos Contractuales.

En una primera fase, Cacsa adjudicó el concurso a otra empresa de mantenimiento, adjudicación que fue impugnada por varias de las empresas participantes en la licitación alegando que existía baja temeraria. Finalmente, el Tribunal aceptó las alegaciones presentadas y dictó resolución en la que se adjudicaba el concurso a la unión temporal de empresas (UTE) que actualmente presta sus servicios de mantenimiento.

Y añaden que «en la gestión de las contratas de mantenimiento es habitual la existencia de incidencias que se trabajan mediante los protocolos establecidos a tal efecto». Sobre el caso concreto denunciado por el operario, señalan que «el trabajador alertó de supuestos incumplimientos por parte de dicha contrata, los cuales se trabajaron desde distintos departamentos de la empresa ajenos a la dirección técnica que se implicaron en su estudio y que se resolvieron sin incidencias».

Con fecha 13 de junio de 2017, ante la denuncia interna del trabajador, Cacsa asegura que activó el protocolo de actuación frente al acoso, laboral, discriminatorio y violencia en el trabajo, y, «tras la práctica de la prueba oportuna en la que participa en todo el proceso un miembro del comité de empresa, se concluyó la inexistencia del acoso laboral». Y añaden que «esta conclusión es avalada por el informe emitido por el servicio técnico de prevención, una vez evaluada la prueba practicada obrante en el expediente».