La Fundación Pequeño Deseo, que consigue llevar tantos sueños a los niños con enfermedades crónicas o de mal pronóstico, organizó ayer su primer Encuentro Solidario y lo hizo por todo lo alto, en una fiesta a la que acudieron representantes del mundo socioeconómico y cultural valenciano. El evento se celebró en Àtic, cedido por Palau Alameda.