«En la ciudad no sólo hay turistas, que son muchos. También muchos residentes, que pueden ser ya entre siete y ocho mil. Por eso hemos pensado que merecen nuestra atención». Con estas palabras, el vicario de los Santos Juanes, Aquilino Martínez, justifica la apertura de un nuevo servicio religioso con carácter permanente que se oficiará en su parroquia. Todos los sábados, a las seis de la tarde, y en la capilla de la Comunión, tendrá lugar una misa en italiano.

Las misas ofrecen toda la liturgia en italiano, incluidas las lecturas, los cantos y la homilía, según indicó la agencia Avan. Y está pensada, además pensando en el carácter céntrico de la iglesia, por la que pasa buena parte del turismo que viene al «cap i casal».

Además de los Santos Juanes, en València hay otros ejemplos de templos que organizan misas en diferentes idiomas. Es el caso de la iglesia de San Juan del Hospital de Valncia con un párroco nativo de un país de habla inglesa. Y la parroquia de San Valero Obispo y San Vicente Mártir, en Russafa, acoge misas para los fieles chinos los domingos a las 17.30 horas en un barrio donde la colonia asiática ha sido tradicionalmente muy numerosa.

Igualmente, los fieles polacos que viven en Valencia se reúnen en la parroquia Nuestra Señora del Rosario del Cabanyal, en la Plaza del Rosario, todos los domingos a las 18 horas. Por último la comunidad greco católica celebra su misa en ucraniano los domingos a las 9.30 horas en el convento de la Trinidad.