Uniformes insuficientes y chubasqueros deteriorados. Los agentes de Policía Local llevan tiempo denunciando las «graves carencias» en los uniformes del cuerpo después de que presentasen, en la última mesa técnica, un «minucioso estudio» que evidenciaba la carencia a la que se refieren.

Fue entonces cuando los sindicatos SPPLB y CSIF, con el respaldo administrativo, establecieron un plan a cuatro años con una inversión de 500.000 euros anuales para renovar los uniformes y dotar a los agentes de la vestimenta necesaria «cubriendo las necesidades mínimas imprescindibles».

Sin embargo, «en 2018 la partida presupuestada se quedó en 154.000 euros, casi una cuarta parte de lo previsto, de los que solamente ejecutarán la mitad» mientras que para 2019, el consistorio informó de la previsión de 240.000 euros, la mitad de los 500.000 euros necesarios.

Es por ello que reclaman al consistorio una mayor dotación presupuestaria para dotar a los agentes de los necesario. Y es que aseguran que cada agente recibe un único polo y pantalón al año, sin prenda de repuesto y también sin calcetines o camisetas interiores.

Recalcan, por tanto, la importancia de la uniformidad en este cuerpo «que recorre las calles de la ciudad a diario». De hecho, el Spplb tacha de «insostenible e intolerable» la situación y lamenta que los agentes deberán ir «con ropa vieja y deteriorada», algo que es «vergonzoso e irresponsable».

«A una gran parte de la plantilla no se le ha renovado el calzado o los pantalones en años, por ejemplo, y ni siquiera hay impermeables para todos, mojándonos sin remedio cuando llueve al ejercer nuestras funciones habituales», indican.

Un «mal endémico que se cierne» sobre el cuerpo y al que «no se le da una solución», denuncian. Por ello, de persistir esta situación, el SPPLB anuncia que iniciará protestas y movilizaciones, haciendo reparto de prendas, demandas a inspección de trabajo.

En relación con el presupuesto de 2018, asegura desconocer «si lo que se pretende con ese dinero es vestir a la mitad de la plantilla o vestir a toda la plantilla medio cuerpo, lo que sí que está claro es que no llega ni a la mitad del dinero necesario para el mantenimiento de la uniformidad e incumple los compromisos adquiridos recientemente de unos 600.000 euros anuales».