La concejala y portavoz de València en Comú, María Oliver, explicó en las jornadas sobre empoderamiento ciudadano y puertos celebradas en Barcelona el pasado mes de octubre que a raíz de la celebración de la Copa del América de 2007 el Consorcio València 2007 aprobó un plan de usos lucrativos para devolver el crédito con el que se pagaron las obras que ha supuesto, dijo, la pérdida del uso público a favor de una serie de concesiones a 30 o 75 años y también la pérdida del poco control sobre este espacio.
Aunque ahora el Consorcio es más participativo el plan de uso mantiene proyectos que Oliver cuestionó como el hotel previsto junto a la antigua Estación Marítima. «Se tiene que hacer un hotel de 30 plantas y eso no se pone en duda aunque se haga un proceso participativo».
Oliver también denunció las puertas giratorias en la Autoridad Portuaria, la constructora Cyes y el Consorcio València 2007. En estos momentos el puerto está trabajando para construir el acceso norte para dar servicio a su ampliación que tira por tierra todo el planteamiento de pacificación del tráfico de la entrada norte porque plantea un túnel (antes fue un viaducto) submarino. de 1.200 millones de euros de inversión.
«Ni río ni huerta, la ciudad va a acabar rodeada de infraestructuras para el puerto, la ZAL, el acceso norte y el puerto de cruceros en la frontera con Natzaret», auguró Oliver. «La historia se repite. Chocamos continuamente con los intereses del puerto, que siempre está compitiendo con otras ciudades para crecer en número de contenedores y superficie».
