Poniendo de base el municipalismo como herramienta de transformación, la concejala de Migración y Cooperación internacional, Neus Fàbregas Santana, y el alcalde de Hebrón, -Al Khalid en árabe-, han rubricado el acuerdo de hermanamiento entre la ciudad palestina y València. De esta forma, han formalizado este sábado el vínculo solidario entre las ciudades.

Fábregas ha explicado que «el acuerdo que vamos a firmar es un paso más en nuestro posicionamiento como Ayuntamiento sobre el pueblo Palestino, generando alianzas desde la Cooperación Internacional por la defensa de los Derechos Humanos».

Los objetivos del acuerdo (que no contiene compromisos económicos, según explican) son apoyar al pueblo palestino en su «justa lucha» para la consecución del derecho de todos los pueblos a la «libre determinación», de conformidad con los principios enunciados en la Carta de las Naciones Unidas y en su Resolución 1514 (XV), de 14 de diciembre de 1960, en la que figura la Declaración sobre la Concesión de la Independencia a los Países y Pueblos Coloniales, así como en su derecho a la autodeterminación, tal como ha destacado la regidora.

Asimismo, el acuerdo contempla cooperar en el desarrollo de las relaciones socio-culturales, económicas y turísticas y el establecimiento de mecanismos de cooperación e intercambio entre los municipios de Hebrón y València, tan amplios como lo requieran las aspiraciones de ambos; la enumeración de materias a desarrollar no es limitada. Por otra parte, se trata de procurar la puesta en práctica de actividades que fundamenten las relaciones de ciudades hermanadas y la directa participación de ambas Municipalidades.

"Asentamiento de soldados israelís" y "agresiones"

Hebron -Al Khalid en árabe- es «una de las ciudades más conflictivas para el pueblo palestino. En ella se encuentran entre 400 y 800 colonos protegidos por 4000 soldados israelís y cinco asentamientos, cuatro de ellos dentro del casco viejo». La ciudad está dividida en dos zonas: H1 bajo autoridad palestina y H2 bajo autoridad israelí. «Cada día, miles de personas palestinas están obligadas a atravesar varios checkpoints, que restringen su movilidad, sumado a que en varias calles de la ciudad tienen prohibido el paso».

«En la ciudad vieja el acceso de la población palestina está restringido y se han cerrado más de 500 tiendas creando el efecto de una ciudad fantasma». Los derechos humanos fundamentales de la población Palestina en Hebrón son «diariamente vulnerados» por parte del ejército y de los colonos, que pasean armados por las calles de la ciudad: «sufren ataques violentos diarios, detenciones sin motivo, amenazas, insultos, agresiones incluso a niños/as y mujeres embarazadas. La provocación de los colonos a los palestinos es diaria, cada sábado los colonos hacen un tour escoltados por decenas de soldados por la parte palestina del casco viejo», ha relatado la concejala Neus Fábregas.