La solución del gobierno tripartito al «lío» de la permuta de Tabacalera, impulsada por el anterior gobierno del PP y anulada por los tribunales por especulativa, suma detractores y son ya tres colectivos ciudadanos los que se han opuesto al traslado de la edificabilidad residencial del entorno de la fábrica a dos parcelas de uso dotacional y zona verde, en el entorno de la avenida de Francia, en las calles Penya-roja y 3 de abril (junto a las naves de la Cros). Dos de ellos (Sociedad Civil Valenciana y la Asociación de Vecinos de Penya-roja) tomaron ayer la palabra en el pleno para denunciar la «injusticia» y la «merma en la calidad de vida» que supondrá la construcción de este nuevo bloque de viviendas porque «quitará a los vecinos luz y aire». Populares y Ciudadanos hicieron frente común con los vecinos y censuraron la supresión de suelo público para que Guadalmedina (familia Ballester) pueda construir un bloque de viviendas de lujo que es «un portaviones», en palabras del concejal Narciso Estellés (Cs).
El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, negó que la solución adoptada suponga una merma de suelo dotacional escolar y de jardines y recalcó que lo que han hecho es aprovechar «retales» de suelo y reubicar el suelo dotacional, de un barrio donde los ratios están por encima de la media, a otro punto de la ciudad. La oposición le recriminó en este punto que haya hecho el cálculo del coste electoral de esta medida, en alusión a que la avenida de Francia no es un distrito de votantes socialistas.
El pleno de ayer aprobó el plan de protección de Ciutat Vella que cataloga 2.250 edificios, restringe los usos hoteleros a 50 edificios singulares y prohibe los apartamentos turísticos, salvo las viviendas turísticas ocasionales.
Sarrià defendió ayer el plan, que pretende potenciar el uso residencial, de las críticas de Amics del Carme que asegura que el plan favorecer la turistificación del barrio y expulsar a los vecinos, y del PP que aseguró que las reclasificaciones para uso residencial de la sede de CC OO y otras «huelen mal»
