Uno de los problemas más acuciantes de València en 2015, además de la corrupción, eran los altos niveles de endeudamiento a los que se había llegado y que habían llevado al ministerio de Hacienda a incluir al consistorio en su Plan de Ajuste 2012-2022. Por aquel entonces, la sensación ciudadana general era que se había, caído, en demasiadas ocasiones, en el derroche de fondos de forma innecesaria. Incluso se creó una «ruta del despilfarro» en la que se llevaba a los visitantes por las zonas más emblemáticas en este aspecto tan «característico».

Ahora, cuatro años después, la situación ha cambiado diametralmente hasta el punto de que no solo se logró salir del citado Plan de Ajuste tres años antes de lo previsto, sino que la deuda municipal se ha reducido a la mitad, concretamente se ha dado una rebaja del 51,07 %.

De este modo, y como argumentan fuentes de Alcaldía, a 1 de enero de 2015 el importe total de la deuda viva contratada era de 784.644.030 euros, lo que representaba, nada más y nada menos, que el 104,71 % de los ingresos corrientes liquidados a 31 de diciembre de 2014. Una deuda, por tanto, superior al 100 % de los ingresos que, aunque era algo bastante habitual entre los grandes ayuntamientos españoles, resultaba también insostenible, como reconoció el propio Ministerio de Hacienda, del mismo partido político que gobernaba en València, al someterlo a aquel plan de Ajuste con el cual su margen de actuación en inversiones y proyectos quedaba muy limitado.

Según las mismas fuentes, a 1 de enero de este 2019 la deuda contratada era de 446.643.135,32 euros, incluyendo la no dispuesta, lo que representa un porcentaje del 53,64 % respecto de los ingresos corrientes de la liquidación del ejercicio de 2018.

Ante ello, el alcalde Joan Ribó argumenta que «una gestión económica eficaz y basada en la eficiencia, nos ha permitido reducir la deuda mil millonaria de los anteriores gestores hasta la mitad». Él tilda de «agobio económico» y «descalabro» la situación que les dejó «la derecha». Y añade que «con rectitud en las cuentas hemos podido enderezar la caja pública municipal».

El tipo de interés, fundamental

Joan Ribó, se enorgullece de estas cifras y explica que una de las claves para lograrlas han sido los acuerdos con diferentes entidades bancarias para reducir significativamente los tipos de interés de los diferentes préstamos: «También hemos refinanciado la deuda durante estos años, para que los intereses que debía pagar el Ayuntamiento por los desmanes de la derecha, al menos no fueran tan sumamente altos», asevera el alcalde.

A este respecto, a 1 de enero de 2015, con un tipo de interés al 0,991 %, el ayuntamiento debía pagar, tan solo en intereses, un total de 7.635.721 euros, con un plazo de vigencia ponderado de 11 años. Por otra parte, a 1 de enero de 2019, el ayuntamiento ha logrado mejorar el pago de su deuda al hacerlo con un interés del 0,235 %. Es decir, 0,756 puntos menos. Con este porcentaje de tipos el ayuntamiento paga ahora tan solo 184.067 euros en intereses, con un plazo de vigencia medio ponderado que se ha reducido hasta los 8 años.

Esto significa que, ahora mismo, el consistorio paga 7 millones 451.654 euros menos en este concepto que hace cuatro años. O, lo que es lo mismo, por cada euro que se paga de intereses por deuda financiera en 2019 se pagaban 41,5 euros en 2015. Esta diferencia se explica en tres puntos fundamentales. El primero de ellos es la reducción, de 3.285.626 euros del capital pendiente entre 2015 y 2019. El otro aspecto sería la ya mencionada reducción de los tipos de interés. Y el tercero la reducción del euribor que ha pasado del -0,019 % al -0,309 %.

Para Ribó esto se ha logrado «a través de la gestión y también mirando siempre por el Ayuntamiento, que es la casa de todos los valencianos, con responsabilidad», asevera.

Anticipo de pago de deuda

Tal y como informaba este periódico el sábado, el ayuntamiento aprobó en la última Junta de Gobierno el avance de 38 millones de euros de la deuda prevista para 2019, así como la contratación de una nueva deuda por un valor de 15 millones. Ante ello el concejal de Hacienda, Ramón Vilar (PSPV), indica que «esto tiene que servir para abordar todos aquellos proyectos que el Ayuntamiento tiene en marcha conjuntamente con otras instituciones, como por ejemplo las inversiones relativas a la EDUSI, donde se enmarca la financiación de los Fondos Feder, por ejemplo, y que provienen del año 2018, pero que tienen que continuar haciéndose en 2019». Finalmente, añadía que «el Ayuntamiento de València, con el Govern de la Nau, sigue cumpliendo y adelantando la amortización de deuda que en el pasado, llegó a superar los 1.000 millones».