El alcalde de València, Joan Ribó, afirmó ayer que solo se celebrará el Festival de Paellas Universitarias en el recinto de la Punta si lo consideran adecuado los servicios municipales, que todavía lo están estudiando, y si lo permite el juzgado en el que ayer los vecinos presentaron una denuncia al respecto con tal de frenar que el Multiespai siga siendo el reciento elegido para realizar el evento.

Por otro lado, Ribó resaltó que «no es todo el vecindario» el que se opone al evento, sino que «hay una parte que nos ha manifestado que no tiene ningún problema».

Unas palabras que ayer indignaron al presidente de la Asociación de Vecinos de la Punta, Vicente Romeu, quien respondió al alcalde de València: «Si no sabe, mejor que no hable».

Y es que el alcalde de la pedanía, Ignaci Vázquez, desmiente que el malestar vecinal haya transcurrido tal como señalaba ayer Joan Ribó. «Si me pusiese a enumerar todas las quejas que me han llegado, no pararía», reconoce. «Desde una persona que tiene un almacén de frutos secos y que no podrá recibir el encargo del viernes porque los camiones no podrán pasar hasta el local, hasta niños que se les dificultará el acceso a su colegio, ya que van en autobús al mismo, o incluso trabajadores que no son vecinos de la Punta, pero que tienen que entrar en la zona para cuidar de las personas mayores que allí viven», asegura Vázquez, quien reconoce que la mayor problemática del evento es que los 25.000 asistentes entren por la misma vía de acceso que el resto del vecindario. Con esto, indica Vázquez, «no está garantizada la seguridad y el bienestar de quienes viven en la Punta».

No obstante, Ribó insistió en que su único motivo para «ayudar» a que la empresa organizadora siguiese contando con el Multiespai para llevar a cabo las paellas universitarias es que «en definitiva tenía vendidas las entradas» y ahora no tendrían lugar al que acudir tras la negativa del Ayuntamiento de Moncada de ceder su espacio. «No queremos dejar colgadas a miles de personas que habían comprado una entrada», aseguró Ribó. No obstante, añadió que si tanto el juez como los servicios municipales encuentran inconvenientes, «será que no».