La Iglesia de Santa Catalina está cada vez más cerca de volver a hacer sonar sus emblemáticas campanas luteranas, ya que el artesano Gabriel Rivera ya ha recibido el encargo de fundir en Montehermoso (Cáceres) el "Peret", utilizando las mismas técnicas de fundición del londinense Phelps, como aseguran desde Mestres Campaners de València.

Así, se prevé que la finalización del proyecto se produzca con el solsticio de verano. "Peret", como su campana homóloga antecesora, será la más pequeña en tamaño, aunque no a nivel sonoro. Eloy, de unos 200 kilogramos aproximadamente, hará de tiple por su timbre tan agudo. La campana tendrá un diámetro de 550 mm, un peso de 95 kilogramos y la nota musical Fa. Respecto a su ubicación, esta se emplazará en las vigas de madera existentes en el techo de la Sala de Campanas, como ocurre en el resto de campanarios de la ciudad.

No estará sola, pues a esta se añade el badajo para su sonido de una sola pieza realizado a forja a través de un método tradicional como las piezas originales. El bronce, explican desde la agrupación, llevará grabado el escudo del Vaticano, la marca del fundidor, una cruz, una cenefa y, por último, una inscripción que envolverá la campana con un texto escrito en latín. Entre alguno de los mensajes, podrá leerse: «Tú eres Pedro y sobre y sobre esta piedra edificaré mi iglesia».

La nueva campana tiene prevista su llegada a la capital del Turia al comiezo de la época estival. Así, entre los meses de junio y julio será expuesta en la Iglesia de Santa Catalina acompañada de un panel informativo en inglés y español para que pueda ser admirada por todas y todos los visitantes del templo.

La consolidación de este proyecto supone, según aseguran desde Mestres Campaners de València, «la mejor celebración posible del 600 aniversario de la muerte de San Vicente Ferrer», así como el trigésimo aniversario de la entidad, que se fundó en 1989.

«Son muy valientes al haber puesto en marcha el proyecto para conservar el patrimonio cultural», concluye Rivera.