La fiesta de San Vicente Ferrer tiene un particular «bis» al siguiente fin de semana en el que, por tradición o por amoldamiento a una cierta comodidad, tres altares, incluyendo uno de los más tradicionados y los dos más nuevos, celebran su particular liturgia de procesiones e izado del santo.

De todos ellos, el altar del Mocadoret ha conseguido consolidar uno de los actos más multitudinarios del querhacer vicentino. Al abrigo del crecimiento de los grupos de baile, su dansà, que tendrá lugar esta noche desde las 23 horas. Medio centenar de grupos, con varias parejas cada uno, forman parte de este singular cortejo, que requiere una verdadera obra de ingeniería organizativa, que se convierte en un verdadero espectáculo a altas horas de la noche. Los participantes empiezan la «dansà» con un pasacalle hasta la plaza del Mercado Central para, a partir de ahí empezar el baile.

Y dos bailes en el Ángel Custodio

Por partida doble son los bailes en el altar del Ángel Custodio, cuyos actos se celebran en sábado y domingo. Hoy es la «dansà» popular desde las seis y media y por las calles del barrio (el altar se alza frente al colegio Maristas en la calle Salamanca). El domingo, a la misma hora, habrá una muestra de folclore. Este altar también tiene «miracle», «El Miracle d'Écija», que no va a concurso.

Este año, el altar estrena dos cuadros originales de Ceballos y Sanabria, que representan los milagros «de la sabateta» y «de la Font de Lliria» que acompañarán a la imagen del altar y que fueron bencedidas ayer.

El Mercado Colón, en territorio dominico, planta junto al mercado del mismo nombre y también celebrará sus actos tradicionales.