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Excavación

El búnker del Saler será aterrado otra vez

La torre se cubrirá con arena por seguridad mientras se redacta el proyecto de restauración

El búnker del Saler será aterrado otra vez

La excavación arqueológica que está llevando a cabo el Ayuntamiento de València en el búnker del Saler, enterrado durante lustros en la arena y el olvido, ha despertado máxima expectación. Militares y altos mandos de Defensa, técnicos del Ministerio de Costas, ingenieros del puerto de València, expertos en patrimonio y curiosos en general han visitado a los largo de estos días la fortificación defensiva que se creía desaparecida en su mayor parte y sobre la que existen numerosas incógnitas. El búnker del Saler (tambión conocido como Mojon de Miaja) es, a la luz de los hallazgos arqueológicos, una de las fortificaciones defensivas costeras mejor conservadas de la Comunitat.

El búnker, sin embargo, no permanecerá mucho tiempo a la vista. El ayuntamiento volverá a taparlo en los próximos días con arena por motivos de seguridad y entretanto se redacta el proyecto de recuperación y puesta en valor que la Concejalía de Recursos Culturales tiene que presentar al Ministerio de Transición Ecológica. El ayuntamiento ha solicitado al ministerio, titular del búnker, la concesión a 75 años de la edificación para poder restaurarla y hacerla visitable.

La excavación arqueológica, que dirige Marisa Serrano en coordinación con la Sección de Arqueología del ayuntamiento, ha sacado a la luz en bastante buen estado de conservación la torre y los dos túneles del búnker que constan en los planos oficiales. El búnker, donde se apostó uno de los cañones navales que formaban parte del sistema defensivo de la costa de València durante la Guerra Civil, está deparando más sorpresas e información de la que se esperaba en esta primera excavación previa al proyecto de restauración, como la existencia de un tercer pasadizo que conecta los dos que se conocían sobre plano. Además, se ha comprobado que la torre donde estaba alojado el cañón tiene mayor profundidad de los esperado, en concreto, se han excavado ya seis metros.

La construcción está en muy buen estado y se han recuperado incluso los tornillos y tuercas del engranaje que alojaba el cañón (trasladado después de la guerra al campo de Gibraltar). También se han localizado numerosos grafitis datados entre el 1939 y 1943.

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Limpian el búnker del Saler

Lo que no ha podido localizar ahora ha sido la sala de máquinas y el polvorín del búnker, ubicados al final de los pasadizos (con una superificie total de 500 metros cuadrados) y cuya recuperación se abordará en otra campaña arqueológica.

Para poder sacar a la luz el búnker, se han tenido que retirar, manualmente, toneladas de arena. Un trabajo en el que los responsables de la empresa de arqueológia que lleva a cabo las excavaciones se han tenido que emplear durante más de tres semanas. La arena ahora volverá al interior del búnker.

El ayuntamiento sopesó la posibilidad de proteger con una cubierta metálica la torre para evitar caídas al interior o accidentes en los túneles mientras se tramita el proyecto de intervención definitivo. Finalmente y teniendo en cuenta precedentes como el caso de Julen, el niño que murió el pasado enero tras caer en un pozo en Málaga, se ha optado por volver a cubrir con arena el búnker.

Para no tener que volver a retirar la arena de los túneles, se tapiará la entrada. La estructura de la torre se protegerá con una malla geotextil sobre la cual se volverá a poner la arena hasta que llegue el momento de continuar con la excavación arqueológica y el proyecto de rehabilitación definitivo cuando el Gobierno de el visto bueno. La idea del ayuntamiento es hacer visitable el búnker integrándolo en el proyecto de recuperación del cordón dunar previsto una vez completado el derribo del polideportivo del Saler.

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