Esta mañana se ha hecho entrega, por parte de la concejala Isabel Lozano, de las llaves de las tres primeras viviendas sociales municipales para mujeres víctimas de violencia machista que procedían, con sus hijos e hijas, de los centros de acogida de la Generalitat. La aportación de estas viviendas sociales, ubicadas en el barrio de Campanar y con alquileres asequibles de no más de 80 euros mensuales, permitirá que puedan recuperar su vida autónoma en un espacio seguro.

La estancia de las familias en las viviendas tendrá un carácter temporal limitado en el tiempo, con una estancia máxima de dos años. Tiempo considerado por la Concejalía de Igualdad tiempo más que suficiente para que las familias puedan recuperarse de la violencia machista e iniciar una vida autónoma al margen de ello.

Después de esta entrega de llaves, las familias tendrán un plazo máximo de un mes, para ocupar la vivienda adjudicada de la cual tendrán que sufragar los gastos del agua, la luz y el gas, aunque los gastos de escalera y comunidad serán asumidos por el Ayuntamiento de València.

Este procolo de actuación conjunta entre la Concejalía de Igualdad y la Dirección General del Instituto Valenciano de las Mujeres y por la Igualdad de Género de la Conselleria de Igualdad, tiene como objetivo crear espacios donde las víctimas de violencia machista, que hayan finalizado su proceso de recuperación en los recursos de acogida de la Conselleria de Igualdad, se sientan seguras y plenamente recuperadas para que puedan emprender una vida alejada de la violencia machista o de la explotación sexual y la prostitución.

Y es que el hecho de que estas mujeres hayan sido víctimas de violencia machista genera una serie de obstáculos que dificulta en gran parte que ejerzan sus derechos de forma efectiva en la sociedad. «Defendemos la vivienda social porque es un elemento básico para el proceso de inclusión social de cualquier colectivo vulnerable, como es en este caso las mujeres víctimas de violencia machista, las víctimas de trata para la explotación sexual o las familias que viven en infravivienda», indica la concejala de Igualdad, Isabel Lozano.

Convenio para amueblar las viviendas

Se trata de viviendas de espacio reducido: una de ellas no tiene más de 45 metros cuadrados, destinada a una de las mujeres que cuenta con un único niño a su cargo. La mayor de las viviendas, de 75,46 metros cuadrados de tres dormitorios, se destina a una mujer con un máximo de cuatro personas a su cargo.

Estas viviendas han sido amuebladas gracias a un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de València y la Sociedad Cooperativa COINFER, la Comercializadora de Electrodomésticos S. A. (Milar-Comelsa), la Asociación para la distribución y comercio del mueble de la Comunitat Valenciana (Comerç Moble) y el Gremio de Comerciantes Textiles, Moda y Complementos de la Comunitat Valenciana (Grecotex).

Este último facilitará los juegos de sábanas y colchas para cunas (en caso de haberlas), así como ocho juegos de sábanas para camas de cuerpo (y sus correspondientes colchas), 24 cortinas y 13 rieles para las mismas.

En el caso de la empresa de electrodomésticos, dotarán las viviendas de lavadoras, lavavajillas y microondas. Mientras, en el caso de la asociación de muebles, se aportará a los hogares los distintos cabezales de cama, mesitas de noche, dos cunas, los colchones, las almohadas, los muebles, las mesas, las sillas, los sofás, una litera y una mesa de estudio.