Habemus acuerdo de gobierno en el Ayuntamiento de València. Compromís y PSPV han sellado este viernes el pacto, después de una tortuosa negociación, que se ha desatascado con la creación de dos vicealcaldías: una para la socialista Sandra Gómez -que hasta ahora había reclamado una vicealcaldía únicamente para su partido- y otra para el partido ganador de las elecciones municipales, en la persona del edil Sergi Campillo.

El nuevo equipo de gobierno municipal se distribuirá en nueve áreas, frente a las diez actuales: cinco para Compromís y cuatro para el PSPV. Aunque está por decidir el nombre de las concejalías, cada grupo mantendrá las que ya tenía mientras que se reasignarán las que se encontraban en manos de València en Comú, socios de gobierno en la anterior legislatura.

Las conversaciones se restablecieron este jueves y se han prolongado incluso durante la madrugada hasta este mediodía, después de que la reunión celebrada el martes de la pasada semana terminara sin haber puesto fecha para un nuevo encuentro.

El acuerdo llega 47 días después de la celebración de las elecciones municipales del 26 de mayo, en los que se han puesto de manifiesto reiterados desencuentros y desconfianza entre ambas formaciones.

Finalmente el acuerdo recoge que haya dos vicealcaldías, una para cada partido, según han anunciado el alcalde, Joan Ribó (Compromís) y la portavoz del grupo socialista, Sandra Gómez,.

Joan Ribó fue reelegido alcalde el pasado 15 de junio con los votos de los diez concejales de su partido, Compromís, por primera vez la fuerza más votada en la ciudad, y los siete del PSPV-PSOE, que renunció a presentar una candidatura, lo que dio la mayoría absoluta (17 de 33 concejales) al bloque de izquierdas frente al de derechas.

Pese a ese entendimiento, han sido necesarias en estas casi siete semanas desde las elecciones la celebración de trece jornadas de reuniones de la comisión negociadora para que, al igual que en la pasada legislatura, gobierne la izquierda en la ciudad de Valencia, aunque ahora ya sin Podemos, que se quedó sin representación en los comicios de mayo.