La «Festa d'estiu» es una nueva forma de mostrar que Benimàmet tiene un sentimiento de pueblo (o de «entidad local menor»). De tal manera que están consideradas como las «fiestas del pueblo», con un programa promovido desde la alcaldía pedanea. Tanto por su población como por la transformación que está viviendo -con la puesta en marcha completa del Parque Lineal como obra emblemática-, el sentimiento diferenciador es cada vez mayor y, aunque a lo largo del año se celebran otras fiestas -tanto Fallas como las fiestas del patrón parroquial, San Vicente Mártir, que tienen lugar en junio-, estas «Festes d'Estiu» tratan de ser un elemento claramente diferenciador y característico. Una forma de hacer cuña dentro de ese particular sentimiento.
La jornada de ayer fue la más importante, puesto que, como elemento troncal de estas fiestas se han incorporado al imaginario popular los desfiles de moros y cristianos en colaboración con la Federación Valenciana. A lo largo de la tarde-noche, aún con bastante calor, desfilaron comparsas de los dos bandos, presididas por los capitanes Moro y Cristiano de la ciudad de València, Valentín García-Casarrubios y Jaime Chacón, en lo que para ellos es un ensayo general de su gran acto, el que cerrará la fiesta de 9 d'Octubre. Y con mucha animación, especialmente en algunas de las calles, que estaban literalmente a reventar. Curiosos contrastes que sólo pueden darse en lugares como Benimàmet, pues, de la misma manera, las comparsas (primero las cristianas, luego las moras) eran aplaudidas por vecinos sentados «a la fresca» en la puerta de casa. Por allí se vio a concejales como las populares María José Catalá y María José Ferrer o el socialista Aaron Cano, aparte del impulsor de esta fiesta, el alcalde pedaneo José Melgares.
Por la noche hubo una cena y una discomóvil.
Hoy habrá juegos infantiles para acabar y simultáneamente, también se celebran los actos de la Fiesta de San José en el barrio de Carolinas, que tendrán como acto principal hoy, a las nueve de la noche, la procesión general.
También Pinedo ha iniciado su largo programa de festejos dedicados a San Rafael y la Purísima, y que se prolongarán hasta mediados de agosto. Ayer fue la misa mayor y una discomóvil.
