El alcalde Joan Ribó ha advertido esta mañana de que solo un acceso norte al puerto exclusivamente ferroviario podría contar con fondos europeos, mientras que la opción de hacer una entrada compartida por trenes y camiones -que defiende el empresariado y la federación de transporte- «la tendríamos que pagar con el dinero de los valencianos y el resto de los españoles, sin fondos de la UE, y creo que es un aspecto muy importante que no se ha tenido en cuenta», ha dicho en una visita a La Marina de València.

Ribó, cuestionado sobre las declaraciones del presidente de la Cámara de Comercio de València en las que defendía que el ferrocarril no puede llegar a la puerta de las empresa, el alcalde asegura que José Vicente Morata «tiene toda la razón», pero matizó: «Está claro que el ferrocarril no puede llegar a la puerta de las empresas, pero no necesariamente los camiones tienen que entrar en cualquier sitio». Y acto seguido ha defendido, de nuevo, su propuesta. «Muchos puertos europeos están planteándose en estos momentos una estación intermodal que tenga una salida del puerto en tren y los camiones lleguen a esta estación intermodal donde se cargarían para llegar a las industrias».

«Si nosotros planteamos una solución ferroviaria de los problemas de movilidad del puerto, esta solución podrá ser financiada por la Unión Europea; si planteamos una solución basándonos en camiones, entonces la tendremos que financiar los españoles, los valencianos, porque no encontraremos en estos momentos ni un duro a nivel europeo que potencie el camión», ha indicado el alcalde.

Joan Ribó considera que su apuesta por el tren trae además otros grandes beneficios para la ciudad. «La apuesta la hacemos pensando en que València es un nodo fundamental del Corredor Mediterráneo, no lo desvinculamos. Vinculándolo conseguiremos que el Corredor Mediterráneo avance por València. Y pienso que este tema del puerto nos puede ayudar a acabar la estación intermodal, a hacer los túneles correspondientes -soterrando Serrería-, ganamos todos, el puerto y todos los valencianos», asevera el primer edil de la ciudad.

Así pues, el alcalde considera que su apuesta ferroviaria sería un «win win» para la ciudad, puesto que es un proyecto medioambientalmente sostenible y permitirá desarrollar otras inversiones ligadas a la ciudad. Si, por el contrario, se apostara por un gran túnel submarino cuyo coste se cifra en 400 millones de euros, Ribó cree que el Estado no invertiría para desarrollar el Corredor Mediterráneo o soterrar las vías de Serrería.

Oltra apela a la sostenibilidad

En su visita a La Marina, Ribó ha estado acompañado por la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, quien se ha referido también a la ampliación norte del puerto, en la que defiende «la búsqueda de un equilibrio entre la actividad económica y la sostenibilidad ambiental». «Cualquier actividad que no tenga en cuenta una sostenibilidad y que no garantice el futuro para nuestros hijos e hijas, es una decisión mala. Y es una decisión que a medio plazo no es buena en lo económico, porque la emergencia climática y el colapso ecológico también es un colapso económico», hadicho Oltra, en clara referencia a que las obras de ampliación precisarían de un nuevo informe de impacto medioambiental, pues el anterior era de 2007.