La Concejalía de Hacienda, a cargo del socialista Ramón Vilar, y la del Ciclo Integral del Agua, dirigida por la también socialista Elisa Valía, valoran una subida de la tasa por los servicios de alcantarillado, colectores y estaciones de bombeo en torno a 1,5 euros según confirman fuentes municipales. Esta medida en la carga impositiva tiene el objetivo de sustituir y mejorar la red de colectores de la capital valenciana después de los graves problemas que se han encontrado en las playas de València a principios de verano tras superar los niveles de bacterias fecales y las 5.000 toneladas toallitas húmedas y bastoncillos de algodón que se extrajeron en el colector norte del Cap i casal -después de una inversión de ocho millones de euros- a finales de marzo.

Además, también se finalizarán los depósitos de regulación de pluviales y los de anticontaminación, las desconexiones de pozos de freático de la red de colectores que bombean agua al alcantarillado y su utilización para la red de riego y baldeo, reciclaje y reutilización de agua depurada.

Esta dotación no incluiría la desinfección y depuración terciaria que estaría a cargo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDERs).Fuentes municipales, también argumentan que la tasa se aprobará en el próximo pleno del mes de noviembre, después de que pase por la Comisión de Hacienda y la Junta de Gobierno.

Negociando con Europa

Asimismo, para lograr esta mejoría en el sistema de desagües, el consorcio tiene previsto realizar un estudio financiero para apreciar el impacto de la amortización y otro estudio técnico, a cargo de la Universitat Politècnica de València, para estimar las necesidades materiales del proyecto. Para ello, el ayuntamiento está en negociaciones con el Banco Europeo de Inversiones (BEI), institución financiera formada directamente por los Estados miembros, con el objetivo de que subvencionen las obras de remodelación del alcantarillado. El BEI no puede financiar más de la mitad de los trabajos y, la otra parte, deberá afrontarlos con recursos propios entre impuestos y tasas.

Este plan de renovación es a largo plazo, en torno a 20 y 25 años. Desde el consorcio explican que si es para 25 años, la obra valdría 160 millones de euros y el BEI financiaría 80 millones. En cambio, si es para la 20 años, la obra costaría 140 millones y el BEI apostaría 70 millones.

Cuestión de salud pública

El Govern del Rialto ya aprobó en su primer pleno municipal de la presente legislatura una modificación de crédito de 2.314.000 euros para diferentes trabajos de rehabilitación de colectores. Como se recordará, un informe de los técnicos del ciclo integral del agua ya advertían a principios de año sobre la necesidad de inversiones para solucionar un tema que consideraban de salud pública. Además, advertían al responsable del área, en aquel mommento el socialista Vicent Sarrià, que se podía incurrir en responsabilidades penales.