Bioparc València se suma a la celebración internacional Bat Night, que se celebra desde 1997 para acercar el mundo de los murciélagos a la ciudadanía y recuerda que esta especie tan emblemática para los valencianos al estar presente en las insignias de instituciones y entidades está en peligro de extinción.

El parque valenciano ha informado, en un comunicado, que se suma a esta iniciativa, promovida por EUROBATS, el Acuerdo sobre la Conservación de las Poblaciones de Murciélagos Europeos en vigor desde 1994 que busca proteger a las 53 especies de murciélagos del continente, y que se celebra el último fin de semana de agosto.

Bioparc apoya este evento y realizará acciones especiales en septiembre, con las que pretende llamar la atención sobre el estado de amenaza de estos animales y el problema que esto supone para el medioambiente.

El murciélago es la especie más emblemática para los valencianos ya que está presente en los escudos y en las insignias de instituciones y entidades desde que el Rey Jaume I colocó "lo rat penat" en su casco y escudo real.

Las mismas fuentes han resaltado que culturas milenarias como la árabe los domesticaban para luchar contra los mosquitos que plagan las zonas pantanosas cercanas a València como l'Albufera pero posteriormente, mitos y leyendas lo han relegado y maltratado hasta llevarlo al preocupante estado actual de amenaza.

El parque está comprometido con la protección de las diferentes especies y sus hábitats, especialmente las más amenazadas y ya ha comenzado a realizar acciones específicas para la preservación del murciélago, a través de la Fundación Bioparc, pues son especies fundamentales para mantener el equilibrio de la biodiversidad.

Bioparc se adhiere a la acción International Bat Night para informar a la sociedad sobre la situación de amenaza de estos animales que incluso se han extinguido en ciertos países y realizará acciones especiales el próximo mes de septiembre.

Las principales razones son la pérdida de perchas, la disminución de áreas de alimentación, el incremento en el uso de pesticidas y los prejuicios derivados del desconocimiento.

Han incidido en que menos del 1 % de los murciélagos tienen rabia, solo tres de las más de 1.200 especies en todo el mundo son vampiros, no atacan a los humanos y sólo muerden para defenderse. Además, pueden ver, comen insectos y algunos actúan como polinizadores y dispersores de semillas.

Las poblaciones de murciélagos son uno de los mejores indicadores de la salud del medio ambiente, ya que prosperan cuando el ecosistema goza de buena salud y es estable.