Los dos heridos con quemaduras graves tras el incendio intencionado de una finca de la avenida del Puerto en la madrugada del viernes siguen hospitalizados en la Unidad de Quemados del Hospital La Fe en estado crítico y en coma inducido. La peor parada fue una joven, de 17 años y nacionalidad española, quien sufrió quemaduras en el 70 por ciento del cuerpo. El otro herido grave, de 26 años y nacionalidad colombiana, tiene lesiones graves en la cara y las manos.

En total los servicios médicos trasladados al lugar atendieron a once personas, entre ellos un bebé de apenas 25 días de vida. Inicialmente se apuntó que los dos heridos hospitalizados en la Unidad de Quemados del Hospital La Fe eran pareja, pero según pudo confirmar ayer este periódico, la joven, con el 70 por ciento del cuerpo quemado, y el otro herido no tienen ningún tipo de relación. De hecho, la muchacha estaba de paso en la finca en el piso de unos amigos y su novio no estaba en el momento del incendio. Por su parte, el otro herido con quemaduras graves es un vecino de origen colombiano que sí reside en el edificio, y quien al parecer, la habría cogido en brazos para ponerla a salvo, según indicaron algunos testigos.

Por su parte, los padres del bebé atendido por inhalación de humo, quienes supuestamente sorprendieron a los autores del fuego cuando peleaban con otra persona en el rellano de uno de los pisos, están atemorizados ante la posibilidad de que puedan regresar a por ellos, ya que les amenazaron de muerte cuando dijeron que iban a avisar a la policía. «Nos atrancaron la puerta, querían quemarnos vivos», relataba a Levante-EMV Christian.

«Casi no he dormido, pueden venir en cualquier momento, la puerta esta rota», explica este vecino, quien junto a su pareja y su recién nacido pasaron la noche en casa de una amiga para estar más seguros. Según denuncian, alguien habría entrado por la noche en su casa, aprovechando que no puede cerrarse la puerta, y les habría robado algunos objetos de poco valor. «No es lo que se han llevado, es que van a por nosotros».

Tras solicitar ayuda a los servicios sociales éstos les han ofrecido la posibilidad de costearles un mes de fianza del alquiler pero que no tenían una vivienda social para ellos. «Nos han dicho que nos busquemos un alquiler barato, pero sin papeles no nos ofrecen nada», se lamenta. Todos los pisos de la finca, propiedad de un banco, estaban 'okupados'.