La concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, informó ayer a los representantes de la Asociación de Vecinos del Cabanyal que el nuevo plan urbanísticos sin derribos impulsado durante la pasada legislatura estará listo a final de año, una vez superada la fase de alegaciones y la incorporación de las demandas vecinales. Así lo explicó ayer a este diario la presidenta de la citada asociación, Pepa Dasí, quien aseguró que la reunión de ayer fue también una primera toma de contacto con la nueva responsable del urbanismo de la ciudad tras el verano.
En la reunión, Gómez les explicó los motivos por los cuales se ha retrasado más de lo esperado el plan especial, al tiempo que informó de las próximas intervenciones de mejora urbanística en el barrio
Dasí apuntó ayer que en el barrio «queda mucho por hacer». Aseguró que la campaña de retirada de enseres abandonados en la calle «está dando buenos resultados» y calles conflictivas en este sentido como podían ser Amparo Guillem han sido limpiadas por completo. «Se lo llevan todo», apuntó Dasí, quien añadió no obstante que los problemas de venta de droga siguen ahí.
En la reunión Sandra Gómez explicó que el ayuntamiento abrirá hoy el tramo de la calle Vicent Brull comprendido entre Vicent Gallart y Avenida Mediterráneo.
La concejala Sandra Gómez aseguró a los vecinos desde su delegación se está trabajando para «dar el impulso definitivo a la regeneración de una de las zonas más degradadas del Cabanyal-Canyamelar» y en este contexto se han llevado a cabo las obras que se han iniciado este mes para finalizar la reurbanización de la avenida Mediterráneo y Doctor Lluch y que se unen también al comienzo de las obras de reurbanización de la calle San Pedro.
Hoy está prevista la presentación del proyecto de remodelación de la plaza del Rosario por parte de la concejala que, posteriormente, realizará un recorrido por alguna de las calles del barrio para comprobar el desarrollo de las obras de reurbanización.
Además de la apertura de la calle Vicent Brull, Sandra Gómez visitará hoy las obras de reurbanización del Jardín Lorenzo de la Flor, otro de los puntos más degradados del barrio del Cabanyal.
