Con la casi unanimidad del consistorio -salvo en el caso de València Acull por parte de Vox-, la ciudad entregará el próximo día 4 las distinciones que reconocen a personas y entidades en los días previos a la festividad del 9 d'Octubre. Ese día, el hemiciclo se abrirá para verificar seis homenajes, dos de ellos a títulos póstumo.

El ayuntamiento ha concedido dos títulos de hijo predilecto y cuatro medallas de oro. Sin embargo, en esta ocasión no se ha propuesto ningún título de hijo adoptivo (reconocimiento a quienes no nacieron en la ciudad).

Los nombramientos de hijo predilecto distinguen a Manuel Casanova, jurista y, durante muchos años, presidente del Real Club Náutico de València -se le considera uno de los grandes artífices de que la Copa del América llegara a València-. Casanova falleció a finales del pasado mes de enero a los 87 años.

La misma consideración tiene, desde hoy, Empar Puchades Giner, siguiendo la línea de reconocer a mujeres comprometidas. Desde la Associació de Veïns de Castellar-L'Oliveral ha dirigido una incesante labor de defensa tanto de la vida en estas poblaciones como de la huerta que la rodea.

Las Medallas de Oro se han centrado en una persona y una entidad que, en los últimos tiempos, han recibido numerosos reconocimientos. Carmen Alborch sumará este reconocimiento a título póstumo a la larga lista de las recibidas siendo el pasado año la última que se le entregó en vida, la Alta Distinción de la Generalitat, pocos días antes de fallecer. Se le reconoce el papel en el campo de la política y la cultura y la lucha por la igualdad en todos los campos.

El València CF lleva todo el año coleccionando distinciones de todo tipo de ámbitos y colectivos. El centenario de su fundación se ha convertido en el soporte para recordar no ya sus éxitos deportivos, sino la implantación social. reforzada en este caso por la consecución de la Copa del Rey al acabar la pasada temporada.

Integración de inmigrantes

València Acull es uno de los colectivos que, con el cambio de color en la corporación municipal, han empezado a recibir el reconocimiento del ayuntamiento. Habría sido impensable, por ejemplo, que Salvem e Cabanyal hubiese recibido distinción alguna en tiempos pasados, como sí que ocurrió hace doce meses. De València Acull se reconoce ser una entidad sin ánimo de lucro destinada a la integración de las personas inmigrantes en la ciudad.

Y los 250 años de San Carlos

Por último, y siguiendo con los aniversarios, el 250 cumpleaños de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, con su llegada a una cifra «redonda», permite reconocer « su presencia constante en la vida cultural valenciana y su tarea actual, sin la cual el panorama artístico en nuestra ciudad no podría ser el que es. En todo este tiempo ha sido desde escuela de aprendizaje técnico hasta órgano consultivo del gobierno valenciano y en la actualidad continúa dedicándose a la docencia, la investigación y la divulgación».

Estas seis propuestas fueron aprobadas por la comisión de Cultura del pasado 18 de abril.

El pasado año hubo tres nombramientos de hijos adoptivos: al científico Avelino Corma, la activista del movimiento feminista Teresa Meana y el fotógrafo José García Poveda. Hubo, a su vez, cinco medallas de oro a Salvem el Cabanyal (que pocos meses después se disolvería, una vez cumplida su labor social), la plataforma #QuieroCorredor, el Cottolengo del Padre Alegre, la Coordinadora de Sociedades Musicales Federadas de la Ciudad de València y a la Casa de la Dona.