La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de València (FAMPA-València) apoya el Mapa Escolar, un estudio llevado a cabo por la
La Federación ha tenido acceso al informe pertinente de conclusiones y ha corroborado lo que ella ha venido denunciando durante muchos años; que el proceso de admisión de alumnado «tiene importantes deficiencias e irregularidades, entre ellas que no garantiza la distribución equilibrada del alumnado entre centros públicos y privados concertados».
Desde FAMPA-València recuerdan que una de sus reivindicaciones históricas ha sido «exigir medidas para corregir los desequilibrios en la escolarización». Para ellos el proceso de escolarización actual ha provocado consecuencias como la segregación del alumnado en determinados centros, «generando guetos y masificando unos centros educativos en detrimento otros». Por eso siempre se han posicionado en contra del distrito único «porque promueve la segregación escolar y provoca desigualdades educativas, y esas desigualdades merman las oportunidades educativas de todas y todos a tener itinerarios educativos de éxito».
Ellos recalcan que «hace falta que la proximidad sea el criterio de acceso a las escuelas de los barrios, sean concertadas o públicas, «porque permite elegir un centro educativo público y de calidad en pro de la sostenibilidad (tráfico, contaminación, posibles accidentes, coste de desplazamiento, ahorro de tiempo,...) además porque favorece la integración en el entorno de los niños y niñas».
FAMPA-València reclama ser vigilantes en el proceso para evitar los fraudes que se den en algunos centros para escolarizar a sus hijos e hijas, «situación que provoca que sean las escuelas quienes eligen a su alumnado y no las familias». Por último, lamentan que «un estudio científico, sólido y riguroso y que tiene que servir como herramienta para solucionar las deficiencias en materia de escolarización sea utilizado interesadamente para hacer partidismo».
