No se han arredrado en el Cabanyal -sociológicamente con mayoría de votantes de izquierdas- en celebrar su tradicional fiesta dedicada a uno de sus patronos, el Cristo del Salvador -Cristo salvador de tot lo món- jornada que este año coincide con el día de las elecciones, y a la hora del cierre de los colegios electorales y comienzo del escrutinio sacarán en procesión la popular imagen histórica de los marineros y pescadores.
Durante toda la semana un apretado programa de actos, entre los que están los ritos del descendimiento del altar mayor y preparación de la imagen, novena, entrega de becas escolares a niños desfavorecidos y concierto del Coro Sant Yago, prologará el día de la festa grossa. El domingo 10, tendrán su Misa Mayor en el templo donde se le venera, Parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles, seguida de mascletà disparada por los Hermanos Caballer, y a las ocho de la tarde la procesión, que terminará con el "besapie" de la imagen.
El Cristo cuenta con una Hermandad que vela por él y los clavarios organizan la fiesta. La Hermandad ha luchado lo indecible por mantener viva la fe y devoción a este histórico Cristo, especialmente tras la guerra civil para recuperarse. Tuvo en contra hasta la postguerra en que un gobernador de Franco Luis Planas de Tovar no les dejaba hacer Via Crucis por la calle en Semana Santa, por ir con la cara tapada.
El Cristo del Salvador original, que aún se conserva, en la Iglesia del Salvador, junto al antiguo puerto romano de la ciudad en el viejo cauce del río Turia, cuenta la tradición que el 9 de noviembre de 1250, apareció flotando contra corriente en las aguas del rio. Procedía de la Beirut cristiana, en Líbano, donde fue lanzada al mar cuando los musulmanes la conquistaron y destrozaron todo vestigio cristiano. Cruzó el Mediterráneo y se introdujo por el río, yendo a parar a un dique cercano al templo. Los pescadores en aquella época no vivían junto al mar, sino el hoy centro de la ciudad, barrios donde hoy quedan calles como la de Barcas y el Mar. Al ser desalojados de esta zona marcharon a la playa donde se instalaron.
El P. Juan Luís Corbín Ferrer cuenta que «la imagen del Santísimo Cristo del Salvador fue una réplica de la que con la misma advocación se venera en su iglesia del mismo nombre en Valencia. Este origen devocional se remonta al año 1815, en el que las gentes del Cabañal solicitaron de la autoridad eclesiástica que la imagen del Cristo del Salvador fuese trasladada a la Iglesia de Nuestra Señora de los Angeles, dado que le habían proclamado Patrón de aquella feligresía. Ante la negativa de esta proposición se les concedió la facultad para que pudieran realizar una réplica de la imagen». El facsímil comenzó a ser venerado en una casa particular hasta la construcción de Nuestra Señora de los Angeles del Cabañal, el día 9 de noviembre del año 1850».
En 1842, con ocasión de una epidemia, sacaron su imagen en procesión por el pueblo y se sintieron aliviados. En el 36, fue quemada la imagen por los pirómanos de lo religioso y de nuevo fue hecha, aunque no facsímil de la de Valencia, escultura de José Estellés, que retocaría años después Carmelo Vicent.
El del Salvador es el más popular de todos los Cristos de Valencia, sobre todo de la Semana Santa Marinera - Valencia no tienen Semana Santa externa o popular, sólo sus barrios marineros- y en el amanecer del Viernes Santo es llevado al mar, donde se reza por los marineros que murieron faenando en el mar.
