El alcalde de València, Joan Ribó, anunció ayer la voluntad del Gobierno Municipal de poner en marcha un Plan Municipal de Convivencia, «fruto del consenso, que escuche a todas las personas y que ayude a la ciudadanía a disfrutar de su derecho, para fundamentar nuestra ciudad como espacio de desarrollo lleno de los derechos humanos». Así lo dijo durante la apertura del Simposium Europeo Ciudades vs Odio: Buenas prácticas municipales por la convivencia, contra la discriminación y el odio, que se celebra en el Centro Deportivo Cultural La Petxina, en conmemoración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Durante las distintas sesiones, se presenta y se discute sobre conceptos, ejemplos de buenas prácticas y enfoques para la implementación de los derechos humanos en el contexto municipal. El simposio, en el que participan más de 300 personas, está organizado por la Concejalía de Igualdad, Políticas de Género y LGTBI. El Alcalde, Joan Ribó, ha participado en la inauguración de las sesiones, acompañado por la concejala de Igualdad y Políticas de Género, Lucia Beamud, y otros miembros del equipo de gobierno, como el vicealcalde Sergi Campillo y los concejales Isabel Lozano, Maite Ibáñez, Aarón Cano y Luisa Notario.

Durante su intervención, el alcalde ha destacado el «camino firme que ha recorrido la ciudad de València en la lucha contra la discriminación y contra el odio», y ha anunciado también la futura Oficina de No Discriminación, «que será un instrumento fundamental en este trabajo que junto con la cooperación internacional marcará un futuro esperanzador en cuanto a los derechos humanos».

El alcalde, Joan Ribó, ha subrayado la defensa que encabeza el Ayuntamiento de Valencia «del derecho de las personas a ser y vivir libremente en la ciudad». «A veces -subrayó- los hechos discriminatorios nos limitan y nos impiden ser quién somos sin ningún tipo de traba; por eso se tiene que notar, se tiene que ver la iniciativa y el apoyo municipal que, junto al trabajo de entidades y organizaciones, tiene que orientar, ayudar y acompañar a aquellas personas excluidas o asediadas solo por el hecho de vivir en libertad».

Ribó concluyó destacando el derecho inalienable de quienes «solamente quieren vivir como cualquier persona, que solamente quieren poder expresarse como el resto, que solamente quieren trabajar, estudiar, disfrutar, de la ciudad igual que cualquier otra», y ha asegurado que el objetivo último de todas las políticas de igualdad y de defensa de los derechos humanos es lograr «una ciudad a escala humana». La jornada continua mañana con una mesa redonda moderada por Miquel Ramos, que cuenta con las intervenciones de Aida Guillén, Shams Asadi, Ángeles Solanes, Ferran Senent, y Javier Vilalta. La jornada concluirá con las intervenciones del secretario autonómico de Igualdad y Diversidad, Alberto lbáñez; de la concejala de Igualdad, Lucía Beamud; y del concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano.