El proceso de participación ciudadana que ha puesto en marcha el Govern del Rialto para analizar y realizar propuestas de cara a la futura reurbanización de la plaza del Ayuntamiento comienza a mostrar sus primeros resultados. La primera gran conclusión es que el 53 por ciento de los vecinos encuestados cree que el actual espacio «no es agradable», frente a un 36 % que se inclina por el sí. La elevada cifra de desaprobación evidencia la necesidad de reformar este emblemático lugar del «cap i casal», por ello la remodelación prevista por el ejecutivo de Compromís y PSPV resulta especialmente trascendental.
La cifra de desaprobación del actual configuración de la plaza todavía es más elevada entre los que la usan a diario, es decir, los vecinos del barrio, ya que el 62 % no la considera agradable, mientras que entre los mayores de 65 años el 58 % también la ver un espacio poco acogedor. El principal causa de la falta de bienestar en la plaza es la ausencia de verde (54%) y la principal queja es el excesivo ruido que genera el tráfico (47%).
Rasgos identitarios
El proceso de participación que lleva a cabo la concejalía que dirige Elisa Valía también preguntaba, a través de un cuestionario digital y preguntas a pie de calle, sobre los elementos que la ciudadanía considera más «identitario y representativo» de la plaza del Ayuntamiento. Se trata de un tema importante, ya que desde el equipo de gobierno ya se explicó que existían pocas líneas rojas en este proceso y que por lo tanto cabía la posibilidad de debatir si en el futuro seguían elementos como la fuente central o la estatua de Vinatea.
Como no podía ser de otra forma el 91 % de los que respondieron aseguran que la Casa Consistorial es aquello que mejor define identitariamente el espacio, aunque otro 81 por ciento de las respuestas incluyó también al edificio de Correos, otra de las joyas arquitectónicas.
Un 65 por ciento de las respuestas incluían entre los elementos identitarios las paradas de flores y otro 62 por ciento las «mascletades». El Teatre Rialto apareció en el 49 % de las contestaciones y la fuente circular en un 48 %. La estatua de Vinatea, en cambio, solo es «identitaria» para el 11 por ciento de los encuestados.
Con todo, en otra de las partes del cuestionario en las que se preguntaba a los participantes si creía que la fuente y la presencia del agua eran importantes para la plaza, el 82 por ciento consideraron que sí, por lo que evidencia la necesidad de que el futuro espacio cuente con este tipo de equipamiento.
Los coches no tienen cabida
En el apartado de paisaje y patrimonio se preguntaba qué elementos de la plaza considera la ciudadanía que restan valor a su imagen y vistas. Más de 700 respuestas de un total de 1.115 señalaron al coche como el principal problema (sobre todo los menores de 30 años), mientras que casi 600 respuestas también indicaron que los contenedores son un problema estético. Aproximadamente un tercio de los cuestionados también indicó la falta de uniformidad de señales y rótulos. Un pequeño porcentaje señaló que el edificio de la esquina de las calle de las Barcas es un horror a ojos del visitante.
En materia de accesibilidad los coches vuelven a ser los grandes damnificados, ya que casi la mitad de los encuestados consideran que son responsable de que la plaza no sea un espacio más amable e inclusivo. Muy cerca se sitúan los que consideran que las terrazas y el mobiliario urbano representan un gran problema, ya que se ven como obstáculos para poder disfrutar la plaza. Tampoco es nada desdeñable que más de 400 personas (de 1.100) señalaran lo inadecuado del actual pavimento de la plaza del Ayuntamiento por resbaladizo.
Es fácil llegar en bus
En cuanto a la movilidad del espacio, la gran mayoría de las personas que han participado en el cuestionario considera que es fácil moverse a pie por la plaza o llegar con el autobús de la EMT, mientras que el taxi o la moto representan medios de transporte con los que es sencillo llegar al corazón de la ciudad. Sin embargo, un tercio de los encuestados ven más difícil que fácil acceder con coche al espacio, a pesar de que hoy en día no existen prácticamente restricciones para cruzar con vehículo la plaza. La cifra es especialmente significativa entre aquellos que no son residentes del barrio. Es también importante reseñar que un elevado porcentaje de jóvenes menores de 30 años ven complicado llegar a la plaza mediante la bicicleta, y es que ningún carril ciclista protegido llega hasta ese punto de la ciudad.
