La quinta edición de DecidimVLC, la iniciativa del Ayuntamiento de València para escuchar las propuestas de los vecinos para mejorar su ciudad, ya ha dado sus frutos. Tras cerrarse el proceso de presentación de proyectos el pasado 12 de diciembre, el consistorio ha hecho público este miércoles el listado con los proyectos ganadores tras la votación realizada en la web hasta el 22 de diciembre.

Así, entre todas las propuestas, destacan algunas con marcado carácter medioambiental y sostenible como la plantación de más arbolado "para una València verde" o la instalación de contenedores 'reverse vending' mediante los cuales se obtiene una recompensa si se reciclan envases. También ha sido aceptada la construcción de una especie de segundo anillo ciclista, así como un estudio del rediseño de carriles bicis problemáticos para recuperar la fluidez del tráfico y otro estudio para la creación de una red de parkings de bajo coste. Asimismo, la remodelación del parque Gulliver o la instalación de lavabos públicos en las playas han quedado aprobadas.

En total son 21 proyectos de los 146 que pasaron a la fase final, según ha detallado en rueda de prensa la concejala de Participación Ciudadana y Acción Vecinal, Elisa Valía.

La propuesta de los envases y el resto de los 21 proyectos aprobados, como plantar más árboles con un millón de euros, creación de varios carriles bici o instalación de árboles solares, «son proyectos alineados con las políticas públicas del Gobierno del Rialto», ha señalado la edil de Participación, Elisa Valía, que ha valorado «de manera satisfactoria» el aumento de un 26 por ciento de personas involucradas en las distintas fases de la consulta ciudadana. En total 20.090 personas, que representan el 2,95 % del censo, frente al 2,33% de la edición anterior. «Vamos a trabajar para rediseñar el proceso y que se involucre todavía más la ciudadanía», asegura la edil socialista, tras admitir que los más jóvenes y lo más mayores apenas participan.

Entre las propuestas aprobadas hay varias que podían generar confusión entre la ciudadanía, pues en el detalle de las mismas se explicaba que lo que se votaba era un estudio de viabilidad, no la ejecución en sí como se leía en el enunciado, algo que advirtió en su día la concejalía de Mobilitat, según explicaron a este periódico durante el desarrollo del proceso. Por ejemplo, se destinarán 18.000 euros para ver si es viable crear una red de aparcamientos de bajo coste; o 10.000 para evaluar un posible rediseño del carril bici de Regne de València si los técnicos creen que es problemático; también 18.000 euros para «peatonalizar para siempre la calle Colón», aunque en realidad solo se dictaminará si es posible hacer esta gran obra. El alcalde Joan Ribó, que ha acompañado hoy a Valía, ya ha advertido de que es algo «muy complicado».

Sí se hará una especie de seguno anillo ciclista, la obra más cara, aunque en realidad es hacer un vial ciclista por las avenidas Peset Aleixandre, General Avilés, Cardenal Benlloch y Eduardo Boscá, con 1.350.000 euros de presupuesto.

Proyectos pospuestos

El Ayuntamiento de València presentó un total de 25 proyectos propios a presupuestos participativos (algo muy criticado por la oposición), de los que 12 llegaron a la fase final. Cuatro se ejecutarán y ocho han quedado descartados al no alcanzar los votos suficientes. Tanto la edil Elisa Valía como el alcalde Joan Ribó han asegurado que estos proyectos que no han sido aprobados este año «se ejecutarán durante el mandato porque son proyectos del ayuntamiento», aunque Valía ha matizado que dependerá de la dotación presupuestaria y la prioridad que ponga cada concejalía.

Entre los descartados llama la atención la reurbanización de Pérez Galdós y Giorgeta, que los vecinos llevan años reclamando por la contaminación actual que soportan. También se posponen la reordenación de la calle Sant Vicent, Gaspar Aguilar o el carril bici de Tres Forques, que se ha quedado cerca del corte.