El servicio de Jardinería del Ayuntamiento de València ha empezado los trabajos de saneamiento y poda de los árboles de la calle Conde de Altea, en el barrio de la Gran Vía. Se trata de 109 melias, además de algunos naranjos situados en la intersección con Jacinto Benavente. Un arbolado que, según explica el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha crecido condicionado por su orientación y buscando la captación de la luz solar inclinándose hacia el centro de la calle. Esto ha provocado que su posición favorezca la rotura de árboles cuando se producen fuertes rachas de viento y temporales, debido a su longitud y al peso concentrado en sus puntas. En algunas ocasiones, han llegado a golpear vehículos.
Ante esta situación, han empezado las actuaciones de poda para rebajar su altura y facilitar la regeneración de su copa para prevenir la rotura de las ramas. Además, después de una revisión del arbolado, se ha identificado aquellos que están en peores condiciones por pudrición o riesgo. En estos casos, en concreto 30 ejemplares, se ha previsto su abatimiento y posterior reposición con nuevas especies adaptables al clima de València y que tengan un crecimiento más contenido, según Campillo. Estas melias serán sustituidas por 26 fresnos de flor, 3 perales de flor y un naranjo. También se anularán dos alcorques porque están ubicados cerca de un paso de peatones.
