Un portavoz de la Asociación de Vecinos de Benimaclet, Arturo Sanz, subrayó que «nuestro primer objetivo es conseguir la mínima construcción de viviendas posible» en la zona, subrayó. Con un tercio o la cuarta parte de esas 1.345 viviendas proyectadas, sería viable para la empresa y se reduciría el impacto en el barrio, explicó Sanz. Además, se debe respetar la entrada de la huerta a Benimaclet porque «no podemos querer proteger la huerta, por un lado, y destrozarla por otro», dijo.