Asimismo, desde la organización también exponen que la idea del evento es informar a la ciudadanía de lo importante que es reducir, reutilizar y reciclar, así como sustituir los envoltorios de plástico de un solo uso por las bolsas permanentes: «No vamos a obligar a nadie, solo regalaremos bolsas y entregaremos un flyer informativo a aquellas personas que lo deseen».
El aspecto más llamativo de esta jornada es que las bolsas de telas también son recicladas. Es decir, las «Costureras contra el cambio climático», un grupo de personas con más de 70 años que se reúne todas las tardes en la sede de Rovella - Font de Sant Lluis -donde hay más de 6 máquinas de coser-, han tejido esas 500 bolsas con telas como fundas de sofá, sábanas, cortinas o manteles donados por los vecinos y otras vecinas también han comprado telas para confeccionar bolsas nuevas. «Es la segunda vez que lo organizamos y la idea surgió en unos coloquios que hacemos en los que estas vecinas recordaban como iban a comprar con capazos y pensaron en hacer bolsas de tela para simular esos capazos».
Además, también se daba la casualidad de que entre las vecinas de Rovella había una que era profesora de corte y confección y se prestó a hacer los patrones de estas carteras de tela para ir supermercado.
Finalmente, la portavoz de «València Saludable» anuncia que los vecinos de la Malva-rosa «harán lo mismo en los próximos meses».