La recogida de «restos» (el contenedor gris) ha disminuido un 5,91% (15.600 toneladas) entre 2018 y 2019, debido a la incorporación de contenedores orgánicos accesibles para el 70% de los vecinos y vecinas de València. Según el vicealcalde, Sergi Campillo, los residuos no reciclables («restos») descenderán a medida que se instalen los contenedores marrones (de orgánico). «Es la primera vez que ante una situación de crecimiento económico han disminuido los residuos generados en este contenedor», explicó Campillo. Hasta ahora, las tendencias eran directamente proporcionales: cuando crece la economía, crece también la cantidad de residuos no reciclables. Para el vicealcalde, uno de los objetivos «primordiales» es reducir los «restos» y conseguir que la ciudadanía introduzca todos los residuos reciclables en sus contenedores correspondientes. «La ciudadanía está cada vez más concienciada y reclama más facilidades», añadió.