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Alternativa

Ribó sopesa externalizar también las licencias de actividad para evitar el colapso

Compromís recaba informes legales para aligerar la carga de trabajo al servicio a través de entidades colaboradoras como ha hecho Urbanismo

Funcionarios del Ayuntamiento de València. a. montesinos

La Concejalía de Actividades, con Lucía Beamud, de Compromís, al frente sopesa la posibilidad de externalizar la gestión de las licencias de actividad ante el atasco de expedientes en el servicio, tal como tiene previsto hacer el área de Urbanismo. Pese al refuerzo de personal del servicio de Actividades, el tapón en las licencias de actividad no ha parado de aumentar en los últimos años antes el incremento de nuevas actividades relacionadas con la hostelería y el turismo pero también con la construcción o rehabilitación de edificios para uso hotelero, donde la ciudad vive un auténtico boom.

La externalización de licencias urbanísticas a través de las entidades colaboradoras de la administración (ECU) ha abierto camino para desatascar las licencias.

Como se ha publicado, el ayuntamiento está a la espera de que la Generalitat apruebe antes de primavera el decreto que regula las ECU y que supondrá, según anunciaba esta semana la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, esta semana una «revolución».

Así lo explicó la también portavoz socialista tras la reunión que mantuvo, junto con el alcalde, Joan Ribó, y la concejala de Actividades, Lucía Beamud, con los representantes de la asociación de promotores valencianos (Aprova), constructores y colegios profesionales de arquitectos y aparejadores.

Fueron estos, precisamente, los que plantearon a la regidora de Compromís que se aligerase la carga de trabajo del servicio de licencias, donde un expediente puede tardar hasta dos años en resolverse, para algunos tipos de actividades concretos a través de las ECU.

La concejala de Actividades ha pedido a los servicios jurídicos del Ayuntamiento de València que estudien el encaje legal de esta medida que en breve podría empezar a aplicarse para las licencias urbanísticas.

La externalización de la gestión de las licencias es la solución que han dado otras grandes ciudades al problema del atasco de las licencias, en concreto, en Madrid, donde el ayuntamiento está ahora revisando las ordenanzas de licencias urbanísticas y actividades para unificarlas y agilizar y simplificar así los trámites. Así tiene previsto hacerlo también el gobierno del Rialto.

Por otro lado, la concejala de Actividades, Lucía Beamud, mantuvo el pasado martes una reunión, a modo de sesión de «coaching» improvisada, con los funcionarios del servicio de Licencias y Actividades, molestos por la lluvia de críticas de las que son objeto por parte de los promotores, que denuncian la excesiva burocracia e ineficacia administrativa.

La reunión de Beamud con los funcionarios se produjo precisamente este martes después del encuentro que mantuvo con promotores, cooperativistas y arquitectos el alcalde, Joan Ribó.

El Ayuntamiento de València aprobó en 2017 el Reglamento de Evaluación del Desarrollo y Rendimiento en 2017 a través del cual se evalúa el trabajo de los funcionarios y de los servicios midiendo la superación de una serie de objetivos. El plan, que persigue mejorar la productividad de los trabajadores, no ha tenido apenas consecuencias en el servicio de Licencias, donde se plantean revisar y clarificar los objetivos.

El reglamento, para el que cada año se aprueban nuevos objetivos para cada servicio, incentiva a los funcionarios del area de Licencias de Actividad con 8 y 10 puntos si gestionan entre 9 y 10 expedientes al mes.

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